El ambicioso proyecto de recuperación del espacio público y mejora de la seguridad y la movilidad peatonal en la carretera provincial EP-1104 que atraviesa el barrio de Abelendo entró ayer en una fase decisiva. Y es que, tras varias campañas informativas, el Concello de Moaña comenzó el periodo de recogida de cesiones. En total deben contar con terrenos de hasta 109 parcelas, para poder ponerlos a disposición de la Diputación de Pontevedra y que ésta ejecute a lo largo de 2018 el proyecto ya redactado.

Ayer, durante la primera jornada de recogida de cesiones desde el centro cultural de San Martiño, el Concello ha logrado la aportación de 40 de los propietarios, algo menos de la mitad de los necesarios.

Esta misma tarde técnicos municipales y responsables políticos como la alcaldesa, Leticia Santos, y el edil de Urbanismo, Odilo Barreiro, regresarán al centro cultural para seguir recogiendo cesiones. "Somos optimistas, porque moitos veciños viñeron a informarse e a recoller o escrito de cesión acompañado da ficha de cada parcela afectada, onde se reflexa claramente cal é a superficie afectada e os bens a repoñer. Agardamos que moitos deles aporten mañá -por hoy- as súas cesións", apunta Barreiro.

De todas formas, el gobierno local se da de plazo toda esta semana para obtener casi todas las cesiones. "Os propietarios poderán acudir ao Concello a entregalas e nós tamén contactaremos individualmente con aqueles que non a entreguen cando remate a xornada de mañá", señala el concejal. Eso sí, advierte de que algún caso particular retrasará la disposición de los terrenos. "Temos, por exemplo, unha veciña que reside en Canarias. Quere ceder e temos que remitirlle a documentación por correo urxente".

Si no se logran todas las cesiones no se sacará adelante el proyecto, para el que se suscribirá un convenio entre Diputación y Concello cuyo importe final será cercano a los 1,4 millones de euros. Las arcas municipales deberán asumir el 30% del coste final.

El proyecto de humanización se centra en el trazado de la carretera provincial que discurre entre el lavadero del río Figueirido, en la llamada curva de Paxarín, y el Parque da Feira.

La Diputación dividirá ese trazado en cuatro tramos distintos. El primero, entre el mencionado lavadero y el comienzo del núcleo de viviendas de O Casal, incluirá una senda peatonal solo por la margen izquierda de la calzada. A partir de ese punto se habilitarán sendas por ambas márgenes. En ningún tramo, estos espacios para peatones serán inferiores a los 2,5 metros de ancho.

Este modelo de sendas por ambas márgenes y con dos carriles de asfalto en el centro se repite también en el tramo de la recta de O Casal.

Los otros dos tramos previstos son los más ambiciosos. Se ubican entre el parque de O Casal y la antigua librería de San Martiño, así como desde la recta hasta un poco más adelante de la subida del colegio de Abelendo. Serán dos "zonas de convivencia", en donde la plataforma ascenderá a un nivel más alto. No serán de asfalto, sino de hormigón y la velocidad estará limitada a 30 ó 20 kilómetros por hora. Son las zonas más urbanas y en ellas se priorizará el uso peatonal sobre el tráfico rodado.