Aunque tras el incendio la empresa tuvo que acordar con la plantilla de trabajadores un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal y rotatorio, lo cierto es que apenas se aplicó durante un mes y medio. En estos momentos los 208 operarios de la plantilla estable están trabajando tanto en las dos naves de Domaio que se salvaron del fuego como distribuidos en otras plantas del mismo grupo en Vigo y Vilagarcía.

Todas las administraciones trabajaron de forma rápida para sacar adelante un PXOM de Moaña que llevaba 15 años en tramitación. Esto permitió incluir los terrenos de Fandicosta, que se encontraban en la parte del Plan Xeral suspendida con la aprobación parcial de 2011, y arrancar con la construcción de la nueva nave.

Por otro lado, el proyecto de reconstrucción incluye una mejora en la tecnología para que la compañía pueda protegerse de un incendio en el futuro, evitando así daños tan grandes como los ocurridos con el fuego de mayo del año pasado. Para ello se están separando las tres fases del edificio con muros de hormigón, que impedirían que las llamas se pudiesen propagar de una zona a otra. La nave antigua no estaba sectorizada.

El proyecto presentado en el Concello de Moaña destina 143.000 euros solo para protección contra incendios.