El delegado de la Xunta en Vigo, Ignacio López-Chaves; y el portavoz del PP y diputado provincial de Moaña, José Fervenza, sorprendieron hoy a los viajeros del nuevo autobús de O Morrazo a los hospitales de Vigo al subirse en la parada de Salitre, en Moaña, en el primer viaje de la mañana que sale a las 06:40 horas de la estación de autobuses de Cangas.

La intención de ambos líderes políticos era valorar el nuevo servicio público que se puso en marcha la semana pasada atendiendo la demanda del personal sanitario de estos municipios de O Morrazo que trabaja en los hospitales de la ciudad olívica. Los dos realizaron todo el trayecto de esta línea, con paradas en Meira y Domaio, en Moaña; y en el centro de Vigo, en la esquina de Vázquez Varela con Urzáiz, detrás del antiguo hospital xeral, hospital de Meixoeiro y final en el hospital Álvaro Cunqueiro.

Chaves y Fervenza llegaron a las 06:30 horas de la mañana a la parada de Salitre, frente al Concello de Moaña, en donde según el portavoz municipal del PP había una docena de personas esperando por el autobús, la gran mayoría trabajadoras de los hospitales, aunque también algún usuario como una madre con su hijo pequeño que se dirigía al hospital, ya que la nueva línea de transporte público no sólo es para los trabajadores sino para todos los usuarios.

El portavoz del PP de Moaña reconoce que el viaje tenía como misión verificar también si los horarios estaban bien ajustados ya que se les trasladó por parte de trabajadores que si hay algo de atasco de tráfico en la carretera llegaban muy justos de tiempo a sus puestos laborales. Comprobaron que el autobús pierde algo de tiempo en las paradas que tiene que hacer en ocho semáforos del trayecto, sobre todo en los de Meira, pero dice que llegó a su destino en el Cunqueiro a las ocho menos cuarto de la mañana, quince minutos antes de la hora de entrada del personal. De todas forma, se va a ver si es necesario realizar algún ajuste. En total, el autobús iría con unas 40 personas, 3 de las cuales eran trabajadoras que bajaron en Vigo para ir a Fátima; otras 7 bajaron en el meixoeiro y el resto lo hizo en el Cunqueiro.

Los viajeros del autobús trasladaron tanto a Chaves como a Fervenza la buena gestión que fue poner en marcha esta línea. Antes, el colectivo de trabajadores tenían que contratar un autobús privado que le suponía mucho más gasto que esta línea pública, integrada en el transporte metropolitano con un precio del billete de 1,30 euros.