El líder de los gitanos "morones" -también llamados gallegos para diferenciarse de sus enemigos los zamoranos-, Sinaí Giménez, rompe su silencio después de 18 meses en prisión -lleva en libertad desde agosto- y con el apoyo moral de que ya ninguno de los cuatro hermanos "morones" están encarcelados por la denominada "Operación Vida" que llevó a cabo la Guardia Civil, en abril de 2016, contra una supuesta trama de extorsión en mecadillos.

El miércoles abandonaba la prisión de Monterroso, Saúl Giménez tras 20 meses y abonar en el Juzgado número 3 de Cangas la fianza de 25.000 euros en que finalmente quedó reducida y a la espera de juicio. Claro que la libertad provisional de Saúl contempla medidas, iguales que en el caso del resto de sus hermanos, que quedaron en libertad de forma progresiva, entre abril y agosto, pagando también distintas fianzas. Saúl Giménez debe comparecer periódicamente en el Juzgado o en la Guardia Civil, no puede abandonar el territorio nacional (tiene el pasaporte retirado) ni acercarse a menos de un kilómetro de los mercadillos de Cangas, Moaña, Vigo, redondela, Sabarís (Baiona), Pontevedra, O Porriño, Tui, Ponteareas y Barro.

Pero esta última medida es la que quiere cambiar Sinaí Giménez que ayer reconocía que iban a solicitar por escrito al juez de Cangas, David Pérez Laya, que se les permita trabajar en los mercadillos de, al menos, Moaña, Redondela y Coia, en Vigo, en donde asegura que no trabajan los gitanos "zamoranos" con los que viven un doble enfrentamiento que les ha llevado a estar implicados en dos causas penales. La primera es por la reyerta ocurrida en octubre de 2015 en el mercadillo de Cangas y la segunda es la "Operación Vida". Sinai Giménez asegura que el escrito de acusación de Fiscalía por el caso de la reyerta, que se hizo público la seman pasada y en el que se le piden 14 años de prisión, echa por tierra la acusación de la segunda causa. Asegura que en el escrito de Fiscalía se hace constar que la reyerta se inició cuando un gitano zamorano ocupó dos metros de un puesto que no le correspondía "y agredió a mi madre, no fui yo el primero en agredirle".

El líder de la familia de los "morones" considera que la "Operación Vida" se inició por una "enemistad manifiesta de la Guardia Civil hacia la familia Giménez porque quienes realizan el informe son los compañeros del guardia civil que meses antes encañonó a mi padre en su casa de Tui al que denunciamos y que se sentará en el banquillo el próximo mes de febrero". También asegura que hay una doble enemistad manifiesta porque "quienes declaran contra nosotros pertenecen a las mismas familias que días antes nos atacaron con barras en el mercadillo de Cangas".

Sinaí Giménez considera que el juez en este caso debe de repartir de forma justa el trabajo. en los mercadillos y que en Moaña, Redondela y Coia no acuden los zamoranos. En cuanto a un posible acuerdo con ellos, asegura que después de 20 meses en prisión "no se puede hablar . hemos ido a prisión de forma injusta sin cometer delito alguno". Esto contrasta con el comunicado que remitió el sábado la Sociedad Gitana de Galicia, del lado de los "morones". en el que anunciaba que retirarán la denuncia contra los gitanos "zamoranos" y se negarán a identificar en el juicio a sus agresores en la reyerta del mercadillo. Es más anunciaron que iban a pedir la anulación de la "Operación Vida" porque los testigos son zamoranos con una enemistad manifiesta hacia ellos y con sed de venganza.

Respecto a sus 18 meses en prisión, Sinaí Giménez asegura que los pasó "adaptándome las circunstancias, con la tranquilidad de saber que todas las acusaciones son falsas". En su caso permaneció encarcelado en Villabona (Asturias), Saúl en Monterroso, Juan Paulo en teixeiro, en donde permaneció 16 meses; y Marino, en A Lama, que fue el primero en salir por sus problemas de gordura mórbida. Salió en noviembre de 2016, auqnue volvió a ingresr al no hacer frente a la fianza de 100.000 euros, perode nuevo salió en abril al reducir la cantidad a 50.000 y abonarla.