La Dirección Xeral de Xustiza pondrá fin, el próximo 31 de octubre, al refuerzo de una funcionaria adjudicada al juzgado mixto número 3 de Cangas. El personal de los juzgados cangueses agrupados en el Sindicato Profesional de Justicia (SPJ-USO), denunció esta decisión asegurando que la administración tropieza "dos veces con la misma piedra" y que esta retirada supondría una "gran disfunción", ya que la labor del refuerzo está siendo positivo para el juzgado y se le debe dar continuidad, pues el trabajo avanza a buen ritmo y una nueva reducción de personal supondría un retroceso "con un grave perjuicio para el ciudadano".
Y es que, tras la solicitud incesante por parte del personal, la Xunta hizo efectivo este refuerzo el pasado mes de abril. Esto ayudó a desbloquear el trabajo de un juzgado número 3 que estaba excesivamente retrasado en la tramitación de procedimientos en la Sala Civil, entre otras cosas por tener que encargarse de dos macro causas de gran magnitud y complejidad. Una de ellas es la llamada "Operación Vida", que investiga una supuesta organización criminal encabezada por el denominado Clan de los Morones, a los que se acusa de presuntas extorsiones a vendedores ambulantes, pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas y tenencia ilícita de armas entre otros presuntos delitos.
El refuerzo que llegó en abril sirve también de apoyo ante la próxima resolución del Concurso de Traslados previsto para diciembre, cuya previsión es que una de las plazas ocupada por personal interino en el cuerpo de gestión de los juzgados de Cangas pase a ser cubierta por una persona titular. Este cese y la toma de posesión de un nuevo gestor supondría un retraso aproximado de dos meses, según denuncian los funcionarios, debido a la adaptación. Esto provocaría "nuevamente una grave situación de desamparo en la tramitación de procedimientos y por lo tanto podríamos estar ante un grave retroceso en el órgano judicial".
Representantes sindicales lamentan que la finalización del refuerzo llegue justo "cuando el juzgado número tres empezó a coger un ritmo óptimo de trabajo" y entiende que su continuidad está más que justificada pues las macro causas penales siguen todavía abiertas.
"No se entiende esta medida tan precipitada, sin cumplir con los objetivos por los que fue otorgado este refuerzo", señalan los representantes del personal de los juzgados. Concluyen pidiendo a la Xunta que siga con el partido judicial de O Morrazo el mismo criterio que en otros juzgados a los que sí se dota de más personal si hay carga de trabajo.
