De "incidente desafortunado" califica el concejal de Ensino e Deportes, Xoán Chillón, el ocurrido hace unos días en la piscina municipal A Balea, cuando una mujer se tiró al agua vestida para "rescatar" a un niño que participaba en su primera jornada del programa de natación escolar y se soltó del flotador, sumergiéndose temporalmente. Los familiares atribuyeron el suceso a la falta de vigilancia adecuada, por lo que el padre del niño regresó más tarde y llegó a agredir al monitor que estaba prestando el servicio, aunque este último no llegó a presentar denuncia, según explican las fuentes consultadas.

En el incidente medió Chillón, que mantuvo "unha charla coas persoas implicadas" para rebajar tensiones. El edil asegura que la piscina quedó atendida momentáneamente por un socorrista mientras la otra persona acompañaba a una niña al servicio y que el pequeño alumno no estuvo en peligro, aunque entiende la preocupación y la ansiedad familiar y reconoce que hay "algunhas cuestións a correxir" para mejorar la seguridad, como "dispoñer dunha terceira persoa para evitar estes sustos".

El concejal hace un llamamiento a la calma e insiste en que el servicio se presta en la piscina municipal "con total seguridade" y este curso ha aumentado la satisfacción de los usuarios, aunque "sempre é mellorable" y desde el Concello se están ultimando algunas medidas para avanzar en ese sentido.