La regularización de los furanchos en las Fiestas de San Martiño es algo en lo que la actual comisión incide mucho dada la avalancha de personas que estas fiestas provocan en la parroquia. Antes, los furanchos se abrían prácticamente sin control y desde el Concello se empezó a exigir una relación de hosteleros que fueran a abrir para poder tener un control en caso de una situación de emergencia. El acceso a San Martiño, sobre todo en el entorno del atrio, es complicado por la estrechez de los viales y durante estos días de fiesta se dan citan miles de personas.