La pasarela de moda del comercio de O Morrazo "Amodiña" va ganando prestigio con el paso de los años -ya son seis- y no solo tiene una cuidada promoción, con carteles que reflejan el talento del estudio de fotografía y video GF-Studio de Moaña, sino que en su desarrollo se cuida el más mínimo detalle con una presentadora de renombre, como ha sido la modelo y actriz viguesa Diana Nogueira. A media tarde ya estaba todo preparado, las mil sillas en torno al palco de la música en la alameda de Moaña y la pasarela de 15 metros de longitud sobre la que ayer iban a desfilar 16 modelos femeninos, 8 masculinos, otros 8 de tallas grandes y 34 niños que fueron seleccionados en un casting entre un total de 130 aspirantes.

El desfile de este año se retrasó una semana con respecto a ediciones anteriores para que los establecimientos participantes tuvieran toda la mercancía para mostrar la tendencia de la nueva temporada de otoño/invierno.

Participaron 25 negocios de moda y belleza de O Morrazo que presentaron moda infantil, de hombre y mujer, lencería, zapatería, óptica, peluquería y estética y también decoración. Las empresas participantes contaban con catálogos para entregar a los clientes con información de todo lo que iba a acontecer en la pasarela y todos los comercios que participan.

Fue un auténtico escaparate en el que entre pase y pase también hubo tiempo para el espectáculo con actuaciones musicales y coreografías de baile. Amodiña volvió a contar con Boombox Escuela Urbana, dirigida por los hermanos Yara y Kevin Juncal, formados con profesores internacionales y coreógrafos de grandes artistas,que realizó una demostración de danza urbana. Otro plato fuerte de las actuaciones musicales corrió a cargo de la banda musical The Cherry's Band que dio su toque vintage con notas de swing, funk o soul. Sus tres componentes femeninas a las que luego se incorporaron dos jóvenes forman la única banda gallega en hacer música utilizando solo sus cuerdas vocales.

El público aguantó bien una noche que enfrió tras una tarde de niebla que hizo refrescar el ambiente, pero que despejó a última hora para dejar visible toda la ría de Vigo al fondo de la pasarela de O Morrazo. Los modelos, no solo los profesionales sino los niños seleccionados en el casting, supieron desfilar ante más de un millar de personas que disfrutó con esta "Cibeles" de O Morrazo.