La mañana dominical en Moaña estuvo marcada por las bicicletas. Unas 600 personas decidieron aparcar el coche durante una mañana y cambiar las cuatro ruedas por dos. Y es que la nueva edición de la Festa da Bicicleta fue todo un éxito, tanto que superó todos los registros de participación hasta la fecha.

Aprovechándose en buena medida de que el sol no apretaba tanto como en otros años, más de medio millar de vecinos decidió apuntarse a la fiesta. Buena parte de ellos se anotaron in situ, antes de que comenzase la marcha.

Organizado por el Concello y con la colaboración de la Asociación Deportiva Punta Fondón y de Rotuestudio, los 400 primeros inscritos recibieron un regalo. La mayoría de ellos se anotaron en los días previos, a través de la página web editada para la ocasión por parte de la organización.

Las bicicletas partieron del entorno de la plaza de abastos a las 11.30 horas. Tomaron dirección a la isla de Samertolaméu, recorriendo, a velocidad de paseo, la calle Concepción Arenal y la Avenida da Xunqueira. Llegados al muelle de Meira dieron la vuelta para volver al punto de regreso.

A la marcha acudieron ciclistas de todas las edades, incluso familias completas. Eso sí, en esta ocasión los más pequeños pudieron disfrutar de una mini-marcha por la alameda y de juegos organizados por el Club Ciclista Marín.

El punto álgido volvió a ser el sorteo final de material ciclista con la bicicleta que se sorteó como principal objeto de deseo de los asistentes. En la entrega de premios participaron la alcaldesa y los ediles Ezequiel Fernández, María Ortega y Jorge Santomé. Desde Punta Fondón agradecieron el trabajo de los efectivos de Protección Civil y de la Policía Local.