Esperpento en la Estación de Ría. Más de 2.000 personas con billete para las Islas Cíes se quedaron con las ganas de pisar el archipiélago vigués. Los guardas del parque, apoyados por agentes de la Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Local obligaron a cuatro barcos de las navieras que se encargan del transporte a la joya de Illas Atlánticas a dar media vuelta y regresar a puerto. Además, otras cuatro embarcaciones no pudieron tomar la salida minutos después. El problema: las empresas habían vendido más billetes del cupo máximo de visitantes permitido, establecido en 2.200 personas y 800 campistas. La situación es especialmente grave ya que cuatro navieras afrontan sanciones graves por llevar a Cíes a 4.000 pasajeros de más.

Lo que debería haber sido una relajante jornada en uno de los lugares más hermosos de las Rías Baixas terminó en una larga espera en la Estación de Ría. Centenares de damnificados se agolparon frente a los stands de las dos principales navieras (Mar de Ons y Piratas de Nabia) que cubren los viajes a Cíes para presentar sus reclamaciones y exigir la devolución del dinero abonado cuando adquirieron los billetes. Pasaron más de dos horas hasta que se desalojó el hall principal.

El problema surgió a media mañana. El barco que partió desde Cangas a las 10.15 horas y que debía atracar en Vigo poco después para recoger a decenas de pasajeros fue el primero de los afectados. A su llegada al archipiélago olívico, en torno a las 11.30 horas, los turistas a bordo conocieron la desagradable noticia: debían dar la vuelta. El pasaje no entendía nada. Todos llevaban en su mano el billete que habían recogido minutos antes en el puerto vigués y la tripulación les anunciaba que las Cíes ya habían completado el aforo máximo diario y las autoridades no permitían más visitantes. Ellos, junto a los turistas de otras tres embarcaciones que ya habían partido desde los diferentes puertos (Cangas, Vigo y Baiona) tuvieron que dar media vuelta y regresar. Además, otros cuatro viajes previstos para el resto de la mañana fueron suspendidos por la Consellería de Medio Ambiente.

En el muelle de la playa de Rodas, junto a los agentes movilizados, se encontraban la directora xeral de Patrimonio Natural de la Xunta, Ana María Díaz, y el director del parque Illas Atlánticas, José Antonio Fernández Bouzas. Los que sí pudieron desembarcar a lo largo de la jornada fueron los residentes de la isla, los trabajadores y los campistas. Una de las navieras más importantes, Piratas de Nabia, apuntó a FARO que la venta masiva de boletos llega porque la central de reservas se bloquea ante el aumento de demanda. La otra, Mar de Ons, emitió un comunicado en el que aseguraba haber atendido a sus clientes afectados. Por su parte, Tour Rías Baixas y Bahía Sub indicaron que ninguna de ellas incumplió el cupo permitido.

En lo que va de año la Xunta ya ha abierto 26 expedientes a las navieras autorizadas para llevar visitantes a Cíes. Seis de los mismos se iniciaron por exceso de pasajeros los días 3 y 5 de agosto. El Ejecutivo gallego amenaza con sanciones de hasta 200.000 euros.

El de ayer fue uno de los episodios más negros que se recuerdan. Las infracciones del límite de pasajeros han sido una constante en los últimos años y las sanciones por parte del Gobierno autonómico se han repetido. Sin embargo, hasta este domingo ningún barco había tenido que regresar a puerto. La paciencia del Parque Nacional llegó a su límite y los damnificados fueron los más de 2.000 turistas que ayer se quedaron en tierra.

Marcos Sánchez | Madrileño y turista en Cangas

"Es indignante, ni había hojas de reclamaciones en la naviera"

Llegó con su pareja hace una semana para pasar unas vacaciones en Cangas y ayer cogieron el barco de las 10:15 a Cíes. Pero antes de llegar al muelle de Rodas y por megafonía les dijeron que no podían desembarcar por motivos de la Guardia Civil y del aforo del Parque, que estaba completo. Califica la situación de "indignante". Dice que regresaron en el barco a Vigo en donde la gente se puso muy nerviosa y tuvieron que esperar a otro para retornar a las 13:00 a Cangas. Critica la falta de hojas de reclamaciones y añade que a bordo del barco iba gente de Portugal, de Zaragoza o de Sevilla llegados ex profeso para ir a Cíes.

Ana Paula Dacosta | Brasileña residente en Asturias

"Es muy mala imagen para el turismo, hemos perdido todo

el día y parte de las vacaciones"

No se podía imaginar que tras un recorrido tan largo desde Asturias no podría finalmente conocer las Cíes. Ana Paula Dacosta (en la foto, segunda derecha) llegó a Cangas con un grupo de siete personas. Habían comprado el billete el viernes de la semana pasada para salir en el barco de las 12:00 y regresar a las 19:00, pero "ya no nos dejaron". Asegura que se generó gran tensión en el muelle de Cangas, que se tradujo en gritos de protesta contra las empleadas de la naviera porque la gente estaba malhumorada. La tensión se agravó por la falta de hojas de reclamaciones "Nos hicieron esperar a que llegaran de Vigo, y después no servían. Reconoce que esta situación es muy mala para la imagen turística de la ría y dice que había gente que había llegado expresamente desde Cádiz.

Equipo de gimnasia rítmica Excelt | Dublín

"En lugar de visitar las islas aprovechamos para conocer la localidad de Cangas"

Formado por 16 personas, el equipo estaba entrenando en Vigo, adonde llegó con las monitoras Marga Salón, de Mallorca; y Beatriz Espiñela, de Madrid. Compraron el billete hace una semana por internet. En principio, las monitoras aseguran que iba todo bien, incluso en el barco le dieron la bolsa de basura habitual que se entrega a los visitantes para desembarcar en Cíes, pero después ya escucharon que no podían bajar del barco. Esperan recuperar el dinero de los billetes a través de internet utilizando la fórmula que les facilitó la empresa. Las monitoras de este equipo de gimnasia rítmica reconocen que era el único día que tenían libre y que nunca habían visitado las Cíes, por eso lamentan lo sucedido. En lugar de visitar las islas aprovecharon el día y conocieron Cangas.