Transcurridos dos años desde que el Concello de Cangas y la Diputación de Pontevedra cambiaron de signo político y mantengan sin fecha la ejecución del proyecto de urbanización del vial entre O Viso e Igrexario, los responsables municipales han dado un paso al frente citando a los colectivos sociales de la parroquia y anunciando una convocatoria individualizada a los propietarios de terrenos con el fin de negociar cesiones que permitan acometer las obras. Los contactos corren a cargo de la concejala de Obras e Servizos, Mercedes Giráldez, que la semana pasada se reunió con representantes de distintas asociaciones implicadas en la Escola Vella do Hío, y ahora dará otro paso citando a los dueños de terrenos afectados por el ensanche y la dotación de acera en ese tramo, a los que pedirá que ceden voluntariamente una franja para poder agilizar los trámites.

"A fórmula que barallamos para facelo viable a curto prazo é a cesión de terreo", reconoce la edil, que da por descartado el recurso a la expropiación porque dilataría los plazos y encarecería el proyecto hasta el punto de que su ejecución podría quedar sobre la mesa. Como contrapartida a las cesiones, Concello y Diputación podrían acometer los cierres "básicos" de las fincas y computar, a efectos de edificabilidad, la superficie cedida. "Se nun futuro queren construir na parcela, constaríalle a superficie orixinal, a que tiña antes da cesión para urbanizar a estrada", explica Giráldez, que hace un llamamiento a la colaboración para que el proyecto se encuentre los mínimos obstáculos para hacerse realidad.