"Concello y empresa estamos comprometidos con el cronograma" que prevé redactar y entregar el Plan Xeral de Cangas en tres años, señaló el arquitecto Mario Iglesias, representante de Monsa Urbanismo, tras reunirse ayer con miembros de la corporación para explicarles sus planes de elaboración del documento. Una "intención" que asume el concejal de Urbanismo, Mariano Abalo, conforme al pliego de condiciones del contrato, aunque ambas partes reconocen que los plazos son "razonables pero optimistas" y pueden variar en función de lo que agilicen otras administraciones implicadas. Para el PP, único grupo de la oposición que acudió a la cita, ese compromiso no está claro y prueba de ellos es que el tripartito elude entregar una copia del contrato con esos pormenores.

La cuestión de los plazos fue una más de las que se trataron en la "toma de contacto" entre los representantes políticos y de la empresa adjudicataria, que oficializó el inicio de los trabajos para recopilar información sobre la actual clasificación del suelo, los servicios, infraestructuras viarias, transporte, energía y afecciones al espacio natural, con especial interés por la Costa da Vela, conjuntos patrimoniales singulares, como los núcleos de Donón y Vilariño, o la franja de Aldán que despierta mayor interés urbanístico y donde el tripartito quiere aplicar criterios de conservación y protección. También se hizo hincapié en el sistema viario, en el elevado volumen de tráfico que sufren algunas carreteras que conducen a las playas y en solucionar "puntos de estrangulamiento".

En el encuentro de ayer volvió a surgir el debate sobre la posibilidad de conservar la cartografía y el trabajo realizado por Consultora Galega, anterior empresa redactora del PXOM, que llegó a elaborar un documento de avance que se quedó a las puertas de la aprobación plenaria por decisión del Concello. "Se revisaron los antecedentes (Normas Subsidiarias de 1993 y PXOM de 2013), se recopiló parte de la información existente, se adaptó otra y se incorpora alguna nueva", además de adaptar el conjunto al Sistema de Información Xeográfica (SIX), herramienta que ahora establece la normativa, señalan desde Monsa, aunque el portavoz del PP Rafael Soliño se quejó de que en la sala de juntas no obtuvo una respuesta tan concreta y que los miembros del equipos redactor se limitaron a señalar "que aún estaban examinando" si se aprovecharán o no "los 12 años de trabajo y 600.000 euros invertidos" de las arcas públicas.

Por su parte, Mariano Abalo calificó la reunión de "favorable" e indicó que han quedado "sentadas as bases para cumprir os obxectivos de dotar a Cangas dunha ordenación do territorio", lo que traerá consigo "avances sociais e económicos". No obstante, hasta ahora solo se han "marcado as directrices de traballo" y de ellas se dará cuenta al Consello Sectorial de Urbanismo, cuya próxima reunión se prevé para principios de agosto. Tanto el edil como los representantes de Monsa reconoce que los avances dependerá del "nivel de implicación" de todos los sectores.