Las siete playas de Cangas galardonadas con la bandera azul tienen, "por fin", garantizado el servicio de socorrismo con la contratación de tres de las cinco personas que se presentaron, y aprobaron, ayer las nuevas pruebas de selección realizadas en la playa de Rodeira. Los cinco candidatos, la mayoría alumnos del ciclo de grado superior en Animación de Actividades Físicas e Deportivas (TAFAD) y del curso de capacitación realizado en las últimas semanas por la Asociación de Socorristas Profesionais do Morrazo (Aspom), superó el examen físico con marcas superiores a la media de anteriores convocatorias, según reconocieron miembros del jurado, que destacaron el "alto nivel" de los aspirantes. Los tres primeros firmarán, previsiblemente, a primera hora de hoy los contratos para trabajar en los arenales de Cangas hasta el próximo 30 de septiembre, y los dos restantes quedarán en una lista de espera, aunque es probable que encuentren trabajo en otros municipios con déficit de socorristas.

"Agardamos poder respirar tranquilos desde hoxe", señalaba la concejala de Turismo e Medio Ambiente, Tania Castro, mientras los candidatos concluían las pruebas con resultados satisfactorios, ya que la falta de personal de salvamento ha traído en jaque a los responsables municipales de Cangas, como a los de otros concellos. De hecho, la bandera azul no pudo ondear en Areamilla hasta el fin de semana por falta de efectivos, en concreto tres socorristas y un patrón de embarcaciones, y fue necesario llegar a un acuerdo privado con Aspom para resolver el problema de forma provisional mientras no se resolvían las últimas pruebas. No obstante, y vistos los precedentes, esta vez Castro no quiere echar las campanas al vuelo y esperará a que hoy se firmen los contratos, y a que se resuelva definitivamente la contratación de un patrón de embarcaciones que sigue vacante para dar por resuelto el problema y garantizar el servicio en todas las playas con bandera azul.

"Queremos evitar a opción de externalizar servizos e ese sería o último recurso, só se non nos quedara outra opción", había advertido la concejala en los últimos días, tras reconocer que el Concello había tenido que trenzar una jugada a tres bandas, con Aspom y la oficina de empleo, para solventar el problema. Ahora, superado el proceso de selección de los candidatos, cabría la posibilidad de que estos elijan otro destino, un riesgo que "existe, pero non é previsible", señala la concejala, que ve así más lejos la posibilidad de que el gobierno tripartito recurra a la contratación directa a través de una empresa. Tania Castro deja claro que, a pesar de las urgencias, el proceso selectivo se realizó con todo el rigor, que no hubo manga ancha y que los cinco candidatos superaron las pruebas con creces.

La edil también se encontró ayer con otro imprevisto, al advertirle uno de los socorristas ya contratados en la primera tanda que no podrá completar el período de trabajo hasta finales de septiembre, como figura en el contrato, pues debe retomar antes sus estudios. Castro dice que buscarán "fórmulas" para cubrir esa vacante, aunque no cree que vaya a haber más dificultades para mantener el servicio. Aunque el contrato laboral abarca desde el 1 de julio al 30 de septiembre, los últimos días suelen reservarse para el período vacacional que marca la ley.