El gobierno local de Moaña aprobó ayer, en la junta semanal de gobierno, el proceso de licitación para la humanización de la calle Miguel Enríquez, que atraviesa parte del céntrico barrio de O Real entre la calle Daniel Castelao y la calle José Costa Alonso.

Se trata de una actuación reclamada por las asociaciones que integran el consello veciñal de O Real y que consideraron urgente. La obra, que el Concello financiará con cargo al Plan Concellos de la Diputación de Pontevedra, implica una transformación de la calle. Para empezar pasará de ser un vial de doble sentido a permitir una única dirección de circulación. Además, se ampliará la acera por la margen derecha en dirección ascendente para dar prioridad a los peatones. Se trata de una calle que cuenta con aceras por ambas márgenes en estos momentos.

Además de ampliar las aceras, con la eliminación de un sentido de circulación se ganará el espacio suficiente para dotar a la vía de 12 nuevas plazas de estacionamiento, y es que la falta de zonas de esparcimiento y de plazas para aparcar son los principales problemas que presenta un barrio tan densamente poblado y urbanizado como el de O Real.

La actuación implica actuar sobre unos 600 metros cuadrados de superficie y la calle Miguel Enríquez ocupa unos 90 metros de largo.

La obra incluye también la dotación de hasta cinco árboles para ganar sombra en la nueva área peatonal.

El concejal de Urbanismo, Odilo Barreiro, explica que el precio de licitación asciende a 21.000 euros incluyendo el IVA, aunque espera que durante el procedimiento de adjudicación, las empresas candidatas presenten ofertas a la baja.

Consellos

El gobierno local ha reunido recientemente a todos los consellos veciñais de los distintos barrios y parroquias con el objetivo de escuchar sus demandas más urgentes de cara al próximo ejercicio. Destaca la petición de todos los colectivos vecinales y sociales de Meira, que reclaman la construcción de una senda peatonal por la ensenada de esta parroquia, que podría ser pivotada sobre la franja costera y que uniría la antigua isla de Samertolaméu desde la desembocadura del río de O Barranco con el entorno de la playa de O Cocho.

Desde el Concello analizarán las opciones de este paseo, aunque aclaran que debe ser financiado por otras administraciones debido al coste que tendría.