El incumplimiento del bando de la Alcaldía de Cangas que insta a los dueños de fincas agrícolas y parcelas forestales próximas a viviendas a desbrozarlas para evitar incendios ha provocado ya los primeros expedientes municipales con apercibimiento de multas de entre 1.000 y 10.000 euros. Al menos un propietario ya ha sido sancionado, tras ser amonestado en tres ocasiones y no actuar, mientras la Concellería de Medio Ambiente tramita varias decenas de infracciones que podrían seguir el mismo camino. "Hai unha normativa que cumprir, e máis aínda cando estamos en máximo risco de incendios por temperaturas extremas", señala Tania Castro, delegada de esa área municipal, que ayer también estuvo representada en la concentración frente al consistorio en solidaridad con las víctimas que ya se ha cobrado el fuego en Portugal.

El bando recuerda a todos los vecinos la obligatoriedad de limpiar las fincas de su propiedad y las testeras, ya que, especialmente en la temporada estival, la maleza y la vegetación "a monte" constituyen un verdadero peligro para las edificaciones y fincas colindantes y también para los viandantes, en los casos de parcelas próximas a viales públicos, advierte el escrito municipal, y estipula que, de no ejecutar esos trabajos en un plazo razonable, los propietarios se arriesgan a recibir sanciones económicas en aplicación de las ordenanzas en vigor relativas a los cuidados y ornato que deben mantener las propiedades.

Castro tenía ayer sobre su mesa una carpeta con las notificaciones de los últimos días y al menos una "multa coercitiva de mil euros" a un vecino que no atendió los requerimientos municipales. Si persiste en esa negativa, importe de la sanción puede seguir subiendo hasta los 10.000 euros, antes de llegar a la vía judicial para obligarlo a cumplir la normativa. La parcela en cuestión "está cuberta de maleza, converténdose nun foco de infección e de risco de que se propague un posible incendio", señalan los técnicos del departamento, que también están tramitando casos de personas que no pueden hacer frente al desbroce porque viven lejos de Cangas y aceptan pagar los costes a cambio de que el Concello se encargue de esos trámites tras solicitar varios presupuestos.

La concejala reconoce la "complexidade" de la tramitación de sanciones por no desbrozar, ya que se realizan hasta tres notificaciones, por distintos medios, hasta dar por concluida esa fase y que la sanción sea firme. Si en ese tiempo los propietarios actúan, el Concello da el asunto por resuelto, generalmente sin ejecutar las sanciones. Los representantes municipales dicen que la finalidad no es imponer multas, sino que los propietarios de fincas en esas condiciones actúen "con responsabilidade" y contribuyan a prevenir los incendios y evitar su propagación. Muchos ya lo hacen, pero otros eluden esa obligación.

Desde el gobierno municipal y algunas comunidades de montes inciden en que la Consellería de Medio Rural tiene las competencias en terrenos forestales y debe actuar en el mismo sentido. Desde la Xunta prometieron "mano dura" con los propietarios que no limpien las fincas situadas en los perímetros de núcleos urbanos o viviendas y advirtieron de que la Xunta denunciará "sistemáticamente" a dueños de terrenos que no hayan limpiado de biomasa vegetal los 50 metros del perímetro de viviendas para prevenir incendios y evitar su propagación, aunque el panorama real dista de ser ideal.