Pasar de ser parte del problema a ser parte de la solución. Con este objetivo la Mancomunidade do Morrazo y la asociación Amigos da Terra ponen en marcha una campaña de sensibilización para aumentar las tasas de reciclaje en los municipios de Bueu, Cangas y Moaña. El objetivo es conseguir llegar en los próximos años al índice del 50%, que según una directiva aprobada por la Unión Europea (UE) debe ser una realidad en todos los estados miembros en el año 2020. La campaña se llama O Morrazo Residuo Mínimo y cuenta con una cartelería muy llamativa, utilizando la vinculación de O Morrazo con el mundo del mar: en los distintos carteles se puede ver a un submarinista "atrapado" por una bolsa arrojada al mar, a una sardina dentro de una lata de refresco y a un calamar en una botella de plástico.

La presentación se celebró hoy en las instalaciones de la Mancomunidade do Morrazo en el complejo ambiental de A Portela, una fecha que no es en absoluto casual ya que hoy se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente, tal como recordaban los responsables políticos y técnicos. El presidente de turno de la Mancomunidade y alcalde de Bueu, Félix Juncal, subraya que "resulta necesario traballar na sensibilización" para reducir el número de residuos que se envían a Sogama, lo que a su vez permitiría reducir el coste del servicio y liberar recursos económicos para destinar a otros servicios públicos.

Las representantes de Amigos da Terra, María Durán y Paula Vidal, explicaron en líneas generales en qué consistirá la campaña, que tendrá tres ejes diferenciados. El primero es el de la reducción de la fracción orgánica y apostar por el compostaje. Un total de 150 familias de la comarca (50 por cada Concello) tendrán la posibilidad de participar en la iniciativa. A cada una se le entregará un compostero para que pueden obtener un "compost ecolóxico e obterán froitos de calidade dun xeiro cómodo e sinxelo". Las familias que se adhieran a esta iniciativa recibirán formación para explicar en qué consiste el proceso y contarán con asesoramiento y un seguimiento continuo.

La segunda de las líneas se concentra en el reciclaje de envases. Según los datos de recientes estudios, los concellos de la comarca se caracterizan por un reciclaje de gran calidad, pero en poca cantidad. Esto significa que existe una gran concienciación por parte de los vecinos, pero que faltan suficientes contenedores amarillos para depositar los residuos. Por eso recientemente se han colocado cerca de medio centenar de colectores por las zonas del rural para facilitar ese reciclaje. Desde Amigos da Terra explican que durante el periodo de vigencia de esta campaña, que será de un año, acudirán una vez al mes a cada uno de los municipios para colocar un puesto informativo para informar a la ciudadanía e interactuar con los colectivos sociales.

El tercero de los ejes es el trabajo con los centros educativos, para lo que se elaborarán unidades didácticas y se realizarán talleres.

La campaña contará con una página web propia [omorrazo.residuominimo.com] y con ella se espera contar con una radiografía exacta del nivel de reciclaje en la comarca, teniendo en cuenta que además justamente dentro de un año vence el actual contrato con la empresa concesionaria, Recolte, que también colabora con esta iniciativa, que cuenta con un presupuesto de unos 30.000 euros.

En la presentación de hoy estaban Félix Juncal y el concejal de Servizos de Bueu, Fidel Castro; la alcaldesa de Moaña, Leticia Santos; la teniente de alcalde moañesa y concejala de Servizos, Marta Freire, y el concejal de Medio Ambiente, Odilo Barreiro. Desde el Concello de Cangas excusaron su ausencia. La regidora de Moaña hizo una encendida defensa de la necesidad de reducir la cantidad de residuos que se depositan en el contenedor verde o de fracción orgánica, sobre todo por la extendida costumbre de arrojar en ellos restos de poda y hierba. "A xente ten que saber que o que pagan polo recibo do lixo só cubre a recollida e o traslado ata a planta de A Portela. O traslado dende aquí ata Sogama e a súa incineración alí o pagamos os Concellos", explica. En este sentido puso un ejemplo tremendamente gráfico: "Solo o Concello de Moaña ten que pagar anualmente cerca de 600.000 euros a Sogama por incinerar o lixo. Se conseguimos aumentar a reciclaxe e reducir as toneladas que se envían a Sogama se liberarán recursos para poder atender outras necesidades sociais", sentencia.