La cocina de la vivienda número 73 1º D, sita en la avenida de Ourense, en las denominadas "casas baratas" de Cangas, quedó destrozada ayer como consecuencia de una deflagración de gas, de la que el propietario de la misma salió ileso aunque fue trasladado en ambulancia al Centro de Salud de Cangas para observación.

Una explosión muy fuerte se dejaba oír a las 22.20 horas en toda la avenida de Ourense, frente al Cuartel de la Guardia Civil de Cangas. De repente, las aceras y la calzada se llenaron de cristales y del caos salía un hombre, el propietario de la vivienda, A.F.M., de 55 años, que lo hacía por su propio pie. Ni un rasguño en su piel, ni una mancha de sangre en su ropa. La cocina quedó destrozada y la vivienda completamente sin cristales, con varias puertas afectadas seriamente por la explosión. Según la Policía Local y Protección Civil de Cangas, que fueron los primeros en acudir a lugar de los hechos, la deflagración se pudo producir por una bolsa de gas que había detrás del horno, donde se hallaban varias bombonas de butano. Después de que los efectivos de emergencias entraran en la vivienda y comprobaran la zona más difícil era de explicar cómo A.F.M. había salido ileso de la explosión. Según señalaba la Policía Local, el hombre se encontraba, en el momento de la explosión, justo pegado a la ventana de la cocina. El propietario comentó a las fuerzas del orden que acudieron al lugar que algo le había dado en el pecho, que no sabía si fue alguna parte de un mueble de la cocina o la propia onda expansiva. Nervioso, entró en la ambulancia del 061, donde permaneció un rato mientras efectivos de Protección Civil limpiaban la calzada de cristales y los bomberos de O Morazo revisaban la vivienda. Pero antes de marchar en ambulancia camino del Centro de Salud, A.F.M. aún tuvo tiempo de regresar a la vivienda, de la que salió poco después para subir de nuevo a la ambulancia que ya lo trasladó al Centro de Salud de Cangas para que fuera reconocido por el médico de guardia. Por suerte, ningún vehículo que circulaba en ese momento por la avenida de Ourense fue alcanzado por la onda explosiva.