Emprender no era el objetivo de esta joven extremeña que decidió estudiar Farmacia en la Universidad de Navarra después de que su hermana gemela sufriese cáncer a los 17 años. "Yo quería investigar, pero vi la necesidad de transferir mi tesis, aquello no podía quedarse en un artículo científico. Fue la decisión más difícil que podía tomar y al principio en mi casa se llevaban las manos a la cabeza", relató ayer. Su empresa busca fármacos contra el cáncer infantil con menos efectos secundarios.