El pleno de Moaña correspondiente al mes de marzo dejó ayer una de las situaciones más surrealistas que se recuerdan en un sesión de la corporación. Y es que el concejal de XM, Javier Carro, presentó una moción con la que pretendía forzar la dimisión del edil de Urbanismo, Odilo Barreiro, "si se demuestra que mintió". El propio aludido no pudo saber hasta el propio debate del punto a qué asunto se refería Carro, que desveló que aludía a una respuesta en comisión sobre el tramo de carril bici que se construyó en el paseo del centro.

La petición de dimisión fue rechazada por la mayoría del gobierno bipartito -BNG y PSOE- y con la abstención del PP. El propio grupo del PP requirió a Carro la retirada del segundo punto, en el que reclamaba directamente que se abriese expediente contra los técnicos municipales si fueron ellos los que dieron mal la información a Barreiro.

El concejal de XM defendió que Odilo Barreiro había cometido una falsedad al responderle en una comisión de hace dos semanas que la obra del carril estaba recepcionada por el Concello, además de denunciar que esta senda para bicis "está chea de inclinacións e de baches".

Barreiro, que aseguró que solo dimitiría si se lo piden "os veciños, ou ben o meu grupo político, os meus socios de goberno ou a miña familia", defendió que había dicho la verdad y que "a obra estaba recepcionada e en prazo de garantía para requerir á empresa constructora que se subsanasen os problemas que se detecten".

Antes de entrar en el fondo del asunto, tanto la alcaldesa, Leticia Santos, como la portavoz del PSOE, Marta Freire, recriminaron a Carro que ocultase el fondo de la moción deliberadamente durante los últimos días "causando a indefensión de Barreiro e prexudicando aos outros grupos políticos, que non tiveron a opción de preparar nada". El propio Carro reconoció haber ocultado las razones para pedir la dimisión "para non derlle bazas coas que defenderse".

Barreiro pidió al edil de XM "que manteña a actual obsesión conmigo, e deixe outras obsesións como as que tiña contra a Festa do Mexillón, os profesores do CEIP Reibón e a piscina municipal".

Economía

Otro asunto del pleno fue la dación de cuentas por parte del edil de Facenda, Aldán Santamarina, sobre el descenso del periodo medio de pago a proveedores de 135 días a 26. También expuso el informe sobre el cumplimiento del plan de ajuste. Pese a reducir los gastos en alquileres y mediante licitaciones, el Concello sigue sin cumplir este plan por no subir impuestos como el rodaje.