El Concello de Moaña adjudicó a la constructora "Taboada y Ramos" la obra de separación de aguas y reposición del firme de los caminos de A Miranda y de la Baixada ao Igrexario de Tirán, tal y como había anunciado a comienzos de mes.

Más allá de la importancia de una obra por la que los vecinos de ambas zonas esperan desde hace más de un año, la importancia de la contratación radica en que el ejecutivo local decidió incluir en el pliego de condiciones del concurso público, por primera vez, una cláusula que favorece a aquellas compañías que apuestan por los contratos estables de trabajo, de forma que se concede más puntos a las ofertas que procedan de empresas con más de un 30% de la plantilla indefinida.

Así hasta un tope de 20 puntos sobre 100 para aquellas constructoras que acrediten contar con más de la mitad de su plantilla con un contrato indefinido. La alcaldesa, Leticia Santos, explica que se convierten así en el primer concello en incluir esa cláusula social que ya fue aprobada en pleno por distintas corporaciones gallegas.

En el caso de Moaña, la moción para favorecer a las empresas que apuestan por trabajo estable, se aprobó el pasado otoño y partió de una propuesta del sindicato CIG para velar por el trabajo de calidad de aquellas empresas que aspiran a obras públicas.

"Tratamos de consultar con outros concellos pero aínda non aplicaban esta cláusula social. Ao final optamos pola vía da porcentaxe de plantilla indefinida, porque necesitamos un parámetro claramente medible para que non se poida impugnar todo o concurso público. Nas futuras adxudicacións por concurso puliremos este criterio", explica la propia regidora.

La oferta económica de la empresa adjudicataria era similar a otras, incluso ligeramente por debajo que alguna competidora, por lo que el criterio de la estabilidad de la plantilla resultó clave a la hora de ganar el concurso público.

En lo que respecta a una obra muy necesaria, porque la mala recogida de aguas está hundiendo ambos viales e incluso llegó a generar problemas como un socavón en la céntrica calle Ramón Cabanillas, la empresa contratada se compromete a ejecutar los trabajos en un plazo de unas 4 semanas. Mediante dos brigadas de operarios actuarán simultáneamente en ambos puntos de la red viaria municipal.

El precio se preveía en 350.000 euros. Finalmente, con la oferta a la baja, estos trabajos le costarán a las arcas públicas 246.840 euros.