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Un chapuzón entre libros

Quintela es el primer colegio de Moaña que utiliza la piscina municipal en sus clases de Educación Física

Son 20 los estudiantes de 6º de Primaria de Quintela. // G. Núñez

20 niños de 6º de Primaria bajan del autobús que puso el Concello preparados para bañarse en la piscina de Moaña. No se trata de una excursión, sino de una hora lectiva de Educación Física en la que los pequeños aprenderán, durante los viernes del mes de marzo, tanto técnicas de respiración durante la natación como a nadar correctamente con estilos como la braza, la espalda o el crol.

Son estudiantes del CEIP Quintela, que este mes pasó a ser el primer colegio del municipio en utilizar la piscina municipal para sus clases, con el desarrollo de una unidad durante todo el mes.

Desde la inauguración de la piscina municipal moañesa, a finales de 2009, se contemplaba esta posibilidad de natación escolar, pero nunca se había puesto en práctica. A principios de este curso el concejal de Ensino, Aldán Santamarina, reunió a todos los profesores de Educación Física y a los responsables de la empresa concesionaria de la instalación, Aqualia, para proponer este servicio. En principio solo se acogió el CEIP Quintela, en buena medida porque su profesora de esta materia, Kathi Ríos, cuenta con formación como entrenadora nacional de natación.

El Concello se encarga de financiar el transporte en autobús y Aqualia colabora con un monitor y con los precios reducidos, pues estas clases se cobran a mitad de precio con respecto a un uso normal de la piscina.

"Tivemos unha reunión coas familias, e como poidemos programalo con tempo, optamos por este mes. Para non perder moitas clases, as viaxes á piscina as facemos no horario do recreo, e só se afecta a unha hora lectiva ademáis da de ximnasia", apunta la docente mientras los pequeños se cambian en los vestuarios para salir a nadar.

Una vez en las dos calles reservadas para la ocasión, los pequeños atienden a las instrucciones de la profesora y se afanan en completar los largos con los estilos marcados. No ocultan la felicidad que les supone abandonar durante una hora a la semana su rutina habitual dentro del aula y cambiar los pupitres por el agua de la piscina. "Eles están encantados, comezamos o venres pasado e levan toda a semana esperando a que chegue esta clase", señala la profesora. Apunta también a que esta formación en materia de natación se extenderá a los próximos cursos en el colegio de Quintela, pero siempre con los alumnos que cursen 6º de Primaria.

La clase no se realiza durante una hora de mucha afluencia a la piscina municipal. Apenas unos cinco usuarios nadaban en las calles que quedaban libres durante la sesión de ayer.

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