Cuando los vecinos avisaron de que un vehículo se había empotrado contra un muro en el cruce de Longán con la Avenida de Lugo, en Coiro, una grúa ya se había llevado el vehículo implicado y su conductor se había ausentado del lugar, en opinión de algunos testigos con la supuesta intención de evitar que se le sometiera a un control de alcoholemia. Los agentes de la Policía Local fueron alertados pasadas las ocho de la mañana, alrededor de una hora después del siniestro, e iniciaron las pesquisas para localizar al conductor, que ya ha sido identificado y denunciado. También hallaron el coche accidentado, que había sido trasladado a un taller del parque empresarial de Castiñeiras, en Bueu.

Todo apunta a que el vehículo salió del vial de Longán a velocidad inadecuada y se empotró contra el muro de cierre de una finca. Sobre la calzada quedaron aceites y restos de la carrocería, que fueron retirados por efectivos de Protección Civil.