Representantes de las agrupaciones corales de Moaña: Chorima, Ondas da Ría, Coral Moañesa, de los clubes de jubilados de Moaña y de Domaio, agrupación Samertolaméu y Coro del Carmen (faltaron Orfeón,y Santa Eulalia y Lembranzas) se reunieron ayer con el concejal de Cultura, Salvador Meira; y la alcaldesa, Leticia Santos, para exponerles la situación tras las trabas del párroco a acoger los festivales en la iglesia del Carmen, que siempre se realizaron, y que se buscara una solución. Por lo de pronto el primero de los conciertos previsto en la programación del año, en la festividad de San José, se celebrará en el auditorio del Instituto As Barxas, tal y como se comprometieron los responsables municipales que van a pedir autorización al centro educativo.

Salvador Meira asegura que los representantes de las corales les informaron que cuando dos de ellos acudieron a reunirse con el párroco para fijar las fechas de los conciertos en la iglesia del Carmen, se encontraron con su negativa ya que el Arzobispado sólo permitía conciertos de temática religiosa.

Las agrupaciones plantearon al concejal la problemática de que en Moaña no hay auditorio y pidieron posibles alternativas. Salvador Meira asegura que esta situación vuelve a poner sobre la mesa la necesidad de que Moaña tenga su auditorio y recuerda que el pasado 3 de enero ya pidieron al conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, una reunión para tratar este tema y recuperar el proyecto de hace dos legislaturas que se había presentado cuando era alcalde, el nacionalista Xosé Manuel Millán.

En cuanto al conflicto con la iglesia, el concejal asegura que lo que ofrece es diálogo y quedó con las agrupaciones en ponerse en contacto con el párroco para que explique los motivos, , así como gestionar una entrevista con el responsable de estos asuntos en el Arzobispado para confirmar si esta problermática es derivada de decisiones de este Arzobipsado o del párroco. Meira reconoce que el mejor sitio para estos conceirtos no es la iglesia, pero insiste en que Moaña carece de auditorio, y en todos estos años nunca hubo problema porque "siempre se respetó el templo".

Añade que intentará "limar asperezas" con el párroco: "Vamos a aportar diálogo y trabajo para tener el auditorio".