La corporación de Bueu celebró ayer una de las sesiones más veloces que se recuerdan. En apenas tres cuartos de hora se ventilaron los asuntos del orden del día, que tampoco era muy extenso, y el turno de ruegos y preguntas. El listado de asuntos a tratar quedó aún más aligerado por la retirada de la moción del grupo ACB-SON, en la que pedía la supresión del acuerdo en el que se asignaba una cuantía económica fija a los grupos municipales. El debate sobre este asunto se tuvo que aplazar porque el portavoz de ACB, Julio Villanueva, no pudo acudir al pleno puesto que se encuentra hospitalizado y por tanto no podía defender su moción, que quedará para el pleno de febrero.

La sesión, se celebró por segunda vez consecutiva en el auditorio del Centro Social do Mar, y que el orden del día fuese breve no significa que no se aprobasen acuerdos de cierta enjundia. Especialmente los dos reconocimientos extrajudiciales de deuda, que suman en total unos 450.000 euros. La mayor cuantía, unos 415.000, se corresponden con las facturas de la Mancomunidade del año 2016. El resto son del Instituto Municipal de Deportes (IMD) y de la empresa Idades, del servicio de ayuda en el hogar. "Coa aprobación destes acordos o Concello pode presumir de pechar o ano 2016 sen débeda e pagando aos seus proveedores", explicaba ayer el edil de Facenda, José García Cuervo. Estos dos expedientes se aprobaron con el voto favorable del BNG, la abstención del PP y el voto en contra del PSOE.

Otro de los asuntos económicos que se abordó fue el acuerdo para declarar la indisponibilidad de unos 300.000 euros del presupuesto municipal, que es el de 2016 prorrogado, debido a la aprobación del Plan Económico Finaciero (PEF) por el incumplimiento de la regla de gasto en 2014. Esta restricción solo estará vigente mientras no se aprueben las cuentas municipales para el año 2017.