La "alarma" sonó en torno a las ocho y media de la mañana y cinco horas después la situación estaba controlada tras desplegarse un aparatoso dispositivo contra la contaminación en la costa de Cangas. Un vertido ficticio de 800 litros de combustible desde un buque amarrado al muelle de Frigoríficos do Morrazo en O Salgueirón fue la "excusa" de la Autoridad Portuaria de Vigo para realizar un despliegue de con el fin de salvaguardar las zonas sensibles próximas al foco del incidente, de gran riqueza ecológica y económica. En torno a la una de la tarde, la situación se dio por "normalizada" y los técnicos evalúan ahora qué aspectos funcionan perfectamente ante una contingencia por contaminación marina y cuáles deben revisarse para que nada falle ante un caso real.

Desde primeras horas de la mañana, el aparatoso dispositivo llamó la atención de vecinos y transeúntes que convivieron con la incertidumbre hasta conocer que se trataba de un ejercicio práctico del Plan Interior Marítimo promovido por el Puerto de Vigo para poner a prueba la efectividad de los protocolos de respuesta en casos de emergencias y evaluar las capacidades técnicas y la coordinación entre administraciones. Además de personal y medios técnicos de la Autoridad Portuaria de Vigo (entre ellos las embarcaciones "Berbés " y "Rande", participaron efectivos del Servizo de Gardacostas de Galicia de la Consellería do Mar (encabezados por el buque "Sebastián de Ocampo"), de Capitanía Marítima y de Salvamento Marítimo (Sasemar), que desplegó varios buques, entre ellos el "María Pita", que actuó como centro de control, y el "Salvamar Mirach", con base en el puerto de Cangas. También se utilizaron medios de la empresa Frigoríficos del Morrazo, Babé&Cía y Segem, de lucha contra la contaminación, que utilizaron material absorbente desde el agua y equipos auxiliares en tierra. A media mañana se unió al operativo el helicóptero Pesca I de la Xunta, que realizó varios "barridos" por la costa canguesa y siguió las evoluciones desde el aire.

Con este ejercicio, la Autoridad Portuaria de Vigo persigue dos objetivos principales: probar la efectividad de los planes, protocolos, procedimientos, guías y demás mecanismos operacionales de respuesta en emergencias, así como evaluar las capacidades técnicas de los grupos de respuesta y de los equipos utilizados para mejorar la coordinación, según explicaron sus promotores, que en los últimos años realizaron simulacros similares en la ría, entre otros en el entorno de la factoría moañesa de la empresa Fandicosta, en Domaio.

Aunque en el operativo de ayer no se movilizaron medios públicos terrestres, varios efectivos de Emerxencias Protección Civil estuvieron en la zona haciendo un seguimiento de las maniobras, y el alcalde, Xosé Manuel Pazos, destacó que la elección de Cangas responde a que es uno de los pocos municipios con Plan Territorial de Continxencias por Contaminación Mariña (CAMGAL), aprobado y homologado el pasado 6 de junio por la Comisión Galega de Protección Civil. El último trámite para implementarlo se cumplirá con un simulacro específico que podría desarrollarse en primavera. Moaña también ha elaborado su CAMGAL, aunque debe modificar algunos aspectos para adaptarlo a recientes cambios en la normativa.

Esta herramienta es "fundamental en Galicia", destacan los técnicos, por sus características geofísicas y su amplio historial de accidentes marítimos, como la tragedia del Prestige y sus catastróficas consecuencias. El siniestro despertó conciencias y alentó la necesidad de tener un sistema de alerta permanente y con información actualizada sobre los peligros de contaminación marina accidental, así como definir un protocolo de actuación que coordine los medios humanos y materiales disponibles y fije la jerarquía de mando a la hora de tomar decisiones para proteger a la población y al medio natural amenazado.

Esos son los principales objetivos del Plan Local de Continxencias por Contaminación Mariña Accidental (CAMGAL), que el Concello de Cangas elaboró para los límites de su territorio y, tras pulirlo en varias ocasiones, remitió a la Xunta para homologarlo y poder completar el mapa de riesgos de Galicia y su respuesta ante los mismos, además de incluirlo en el Sistema Nacional de Respuesta, de ámbito estatal.

Zonas sensibles

Miembros de Protección Civil de Cangas -alentados por la entonces concejala Marisa Prieto- trabajando más de dos años en coordinación con otros medios implicados para planificar las mejores estrategias de respuesta ante episodios de contaminación marina, contando con una óptima caracterización de los posibles escenarios. Y en Cangas son muchos, porque el municipio está prácticamente rodeado por unos 30 kilómetros de costa, dispone de otras tantas playas, espacios naturales como los marítimo terrestres de Costa da Vela, Nerga-Barra o Areamilla-Liméns y fluviales como los de los ríos Presas y Bouzós, Orxas y Fials, Donón o las lagunas de Massó y Vilariño, además de zonas de especial protección medioambiental como la Costa da Vela o Cabo Udra, que comparte con Bueu. El plan pone también el foco en los puertos pesqueros y lonjas, las depuradoras de mariscos, piscifactorías, cetáreas y cocederos de mejillón del centro urbano, Vilanova Nerga y Aldán, y de otras grandes instalaciones en el litoral, como son las de la empresa Frigoríficos do Morrazo en O Salgueirón, donde ayer por la mañana se produjo el accidente ficticio para poner a prueba los medios disponibles y su coordinación.