La Consellería de Infraestruturas, que financia las obras de desdoblamiento del Corredor do Morrazo para su conversión en autovía, aseguró ayer que la afección de esta actuación en el castro de Montealegre es mínima, y que únicamente se verá perjudicado por la construcción de un segundo falso túnel el 1% de todo el antiguo poblado castreño. Desde la Xunta explican estas implicaciones de las obras sobre el Patrimonio al causarse revuelo en las últimas semanas, que arrancó con una campaña de recogida de firmas a través de Change.org exigiendo que las obras salven el castro.

A esta campaña se sumó el sábado la visita en varias tandas de un centenar de vecinos hasta las dos áreas del yacimiento en excavación, acompañados de una pancarta en la que demandaban que no se viese afectado el castro. Además, el propio gobierno municipal se reunió el jueves con responsables de la Xunta y les trasladó la inquietud que existe al respecto, solicitando alguna medida que permita conservar las estructuras castreñas sacadas a la luz, dedicadas a viviendas, talleres o almacenes entre el siglo I a.C. y el siglo I d.C.

Desde Infraestructuras señalan que son precisamente las obras de la autovía las que permiten que la Xunta financie "con todos os recursos necesarios" la excavación de las dos áreas del castro que se verán afectadas. Recuerdan que el equipo de arqueólogos dirigido por Miguel Vidal extrajo para su estudio, catalogación y conservación miles de piezas con valor arqueológico.

A finales de octubre se habían descubierto más de 20.000 piezas que serán convenientemente estudiadas y catalogadas. La mayor parte de metal, cerámica y piedra, destacando una figura antropomorfa de 60 centímetros tallada durante el llamado cambio de era en piedra granítica. Apareció sin la cabeza y se estudiará si tuvo un significado simbólico o meramente práctico.

Desde la Xunta aseguran que el trabajo de campo que lleva meses sobre el terreno va a dejar perfectamente documentado ese castro.

Reconocen la preocupación trasladada por la alcaldesa, Leticia Santos, quién aseguró que el Concello no había recibido la información necesaria sobre esa afección. Personal de la Axencia Galega de Infraestruturas (AXI) y de la Dirección Xeral de Patrimonio proporcionarán esta información en un plazo breve. Desde el Concello se pedía respetar las estructuras castreñas sacadas a la luz o su reconstrucción en la parte superior del monte, que no se excavará al quedar a salvo sobre el falso túnel que se construirá en cuanto finalicen los trabajos arqueológicos.

En principio estaba previsto que a lo largo del mes de noviembre finalizase esta investigación histórica. Pero desde la consellería aseguran que aún no acabaron y que analizan, con Patrimonio y los arqueólogos, si es conveniente prolongar más la tarea de recuperación de piezas y de catalogación del poblado.

Además de las piezas rescatadas y de las estructuras de viviendas y talleres, en la cara oeste del yacimiento las excavaciones sacaron a la luz un vistoso enlosado que servía de vial de acceso al poblado, con más de 10 metros en línea recta. Existen pocos viales de acceso de este tipo descubiertos en poblados castreños, pues las excavaciones arqueológicas se suelen centrar en los estratos superiores, sacando a la luz únicamente las cumbres de los montes en los que se levantaron castros.

En la excavación que se realiza en la cara este del monte se descubrió un enorme conchero que demuestra la importancia que tenían los mariscos de la ría en la dieta de este poblado castreño.

Se estima que en su momento de esplendor el poblado podría tener unas 3 hectáreas de extensión y albergar una población de 300 personas.

En la cara oeste del monte se están excavando unos 700 metros cuadrados de terreno y en la cara este unos 400 metros cuadrados.