El paseo de ayer en silla de ruedas por el centro de Moaña fue la primera de las acciones para mejorar la movilidad en el municipio. El resto de partidos aportaron una segunda parte a la moción de Carro de modo que a partir de ahora se creará una mesa para confeccionar un plano en el que se detallen todos los puntos negros del municipio que impiden a las personas con movilidad reducida llevar a cabo una vida normal de la forma más autónoma posible.

Una vez elaborada esta guía de barreras arquitectónicas se podrá diseñar una política para ir corrigiéndolas y adaptando los espacios públicos a medida que el Concello cuente con fondos para hacerlo.

El compromiso es que la senda para acabar con estas barreras se recorra con independencia del color político que gobierne el Concello.