La implantación del sentido único de circulación en el denominado Camiño Vello de San Roque "está provocando un problema social al que el actual grupo de gobierno sigue haciendo oídos sordos", denuncia el concejal de Cangas Decide, José Luis Gestido, quien asegura que se han presentado en el Concello alrededor de 800 firmas de vecinos quejándose de la situación, lo que ha llevado a esta formación política a proponer una alternativa para ordenar el tráfico rodado en la zona.

La propuesta de Cangas Decide ya fue trasladada al alcalde hace dos meses, aunque sin resultados prácticos, lo que lleva ahora a Gestido a repetirla y anunciar que se traducirá en una moción plenaria. Aboga por que el tramo que va desde la Avenida de Vigo hasta la denominada "esquina Mapfre", en una de las travesías, mantenga el sentido único, pero desde ahí hasta la Avenida de Pontevedra se recupere el doble sentido, "ya que existe ancho suficiente para que puedan circular dos vehículos y por supuesto queda espacio para los peatones", argumenta.

El Camiño Vello de San Roque, que comunica la Avenida de Vigo con el entorno de la capilla de la parroquia de Darbo que le da nombre, tiene sentido único ascendente tras los cambios en la circulación realizados por el Concello a mediados de julio para evitar embotellamientos en el tramo inferior, más estrecho, y en el cruce con la carretera general que va a Bueu. La concejala de Obras e Servizos, Mercedes Giráldez, mostró entonces su confianza en que los cambios repercutirían "positivamente na fluidez do tráfico" y, en consecuencia, en la seguridad. Sin embargo, José Luis Gestido no es de la misma opinión. "Pasados unos meses desde la implantación de ese cambio", observa, "se ha comprobado que la medida es poco eficaz, causa atascos en la entrada de Cangas y más accidentes en el cruce de Simón", lo que justifica su moción.