El Corredor do Morrazo se cortará al tráfico, durante casi tres meses, debido a las obras de ampliación, a partir del próximo miércoles sin margen de tiempo para contar con un plan de tráfico elaborado para ese día, más que el que ya se aplica desde el verano cuando comenzaron las voladuras controladas de los taludes. El tráfico se seguirá desviando por la PO-551 y la carretera de Meira de Arriba (EP 1102), aunque antes eran cortes puntuales de 30 minutos de duración, con alguna salvedad por anomalías como la ocurrida el 29 de septiembre cuando la caída de piedras invadió la calzada y el corredor estuvo cortado 6 horas. Las fuerzas del orden son conscientes de que el miércoles habrá colapso de tráfico en la PO-551, sobre todo en las horas punta. El corredor tiene una Intensidad Media Diaria (IMD) de entre 14.000-15.000 vehículos que absorberán la PO-551 y la EP 1102, éste último un vial provincial secundario. No está previsto un refuerzo de la Policía Local para ese día. La plantilla de Moaña en estos momentos son 16 policías y sólo hay dos patrullas: una por la mañana y otra por la tarde.

La Consellería de Infraestructuras, que dirige Ethel Vázquez, anunció el cierre del corredor de forma sorpresiva este pasado día 28, coincidiendo en viernes, y a las puertas del "puente" de Todos los Santos que hace que las empresas de señalización no trabajen el lunes, como tampoco el martes festivo para que se puedan pintar las líneas amarillas de los nuevos carriles en el cruce más conflictivo, que es el de la carretera de Meira de Arriba con la PO-551. Nada se sabe, por el momento, tampoco qué va a pasar con la circulación de los vehículos pesados, si se va a permitir su paso por el centro urbano de Moaña o se obligará a circular por el tramo abierto del corredor desde Cangas hasta Meira y seguir por el desvío de Meira de Arriba hasta la PO-551 en sentido a Rande. De los 14.905 vehículos de IMD que registra el corredor, 498 son vehículos pesados, según el balance de aforos de la Xunta respecto a 2015. En el casco urbano no hay limitación de tonelaje por la travesía de Ramón Cabanillas, pese a que en su momento se había propuesto.

A las 10.00 horas

El corte del corredor, que afectará a los primeros seis kilómetros entre la rotonda de Domaio y el enlace de Meira con la carretera de Marín, está anunciado para las 10.00 horas del miércoles 2 de noviembre, y aún a esa misma hora está prevista una reunión en el Concello de Moaña entre la Guardia Civil de Tráfico, Policía Local, la empresa de la red semafórica de Moaña, y posiblemente representantes de las dos empresas que ejecutan las obras de ampliación del corredor -Copasa y Dragados-y de la Xunta para coordinar ese plan.

Por el momento la consellería sólo puso sobre la mesa un informe, encargado a Esycsa, sobre las intersecciones semafóricas en la PO-551 entre Moaña y el puente de Rande, con el fin de adaptar la red de semáforos a la nueva densidad de tráfico que acogerá este vial, que, al contrario que el corredor, transcurre abierto por la costa a través de los núcleos de población de Moaña con abundantes intersecciones. En ese informe ya se contempla la necesidad de habilitar un carril en la bajada de Meira de Arriba eliminando la zona de aparcamientos, antes de llegar al cruce con la PO-551; y en plena PO-551, aunque la Policía Local ya descartó este último por falta de espacio.

Preferencia a la PO-551

En el plan de tráfico se dará preferencia a la carretera comarcal PO-551. la idea es ir viendo como evoluciona el tráfico y volver a mantener una reunión en quince días.

Desde el Concello de Moaña son conscientes de que los primeros días ocurrirán atascos de tráfico, aunque las fuentes consultadas aseguran que habrá que esperar a ver el comportamiento de los conductores. Entienden que la mayoría procederán del casco urbano de Cangas y optarán por no coger el corredor y circular por la PO-551, con lo cual otro punto conflictivo estará en el centro urbano de Moaña, principalmente en la travesía Ramón Cabanillas y en las rotondas. Según este comportamiento se ajustarán también los ciclos semafóricos. En el estudio encargado por la Xunta se contempla aumentar los ciclos de 90 a 110 segundos en horas punta en todas las intersecciones: cruce de acceso al puerto de Domaio, A Guía, en donde también, si es necesario, se eliminaría el cambio de sentido para no cortar la principal; Avenida de Porta do Sol, en Meira; en la rúa dos Barreiros-Bajada al puerto de Meira; y en el cruce de Meira de Arriba.

Otro de los puntos conflictivos será la rotonda de Domaio, en la que confluyen los vehículos procedentes de la autopista AP-9 (puente de Rande y Pontevedra) y también de Vilaboa.