Las ordenanzas de venta de productos frescos y de venta ambulante se modificaron en Moaña precisamente para atajar el problema de la venta irregular de pescado.

Con este objetivo principal, la Corporación moañesa actualizó en enero de 2014 la normativa de venta ambulante. El principal camino consistió en la subida de las multas por venta ilegal que desde entonces pueden oscilar entre los 100 euros en los casos menos graves y los 3.000 euros para los casos más sangrantes.

La ordenanza que estaba en vigor hasta la fecha había sido redactada en el año 2003 y establecía un importe máximo de 90 euros para las multas por este tipo de situaciones.

Ya en 2014 se reformó esta normativa para tratar de frenar la aparición de casos de venta de pescado de forma ilegal en rutas por distintas parroquias de Moaña. El sector alertó de que esta actividad se incrementó desde el estallido de la crisis económica, como una opción para ganar dinero en negro para aquellas personas sin empleo.

Desde que se reformó la ordenanza, sin embargo, no se ha interpuesto ninguna multa bajo estos nuevos importes.

Mercadillo

La adaptación de la ordenanza de venta ambulante sirvió también para permitir que los mercadillos de los miércoles y los sábados se realicen también cuando coincidan en días festivos, excepto en algunas fechas señaladas como el 25 de diciembre, el 1 de enero o durante las Festas do Carme que ocupan la alameda del casco urbano.