La carretera de O Valado, que comunica el centro de Bueu con el entorno de Castiñeiras y A Portela, permaneció ayer cortada al tráfico y hoy volverá a ocurrir lo mismo desde las 8.00 a las 15.00 horas. La razón de este corte son las obras de seguridad en un talud en el que se han registrado varios desprendimientos, el último de ellos a finales del mes de septiembre. La titular de la vía (EP-1003) es la Diputación de Pontevedra, que después del último incidente envió un requerimiento al propietario de los terrenos para que acometiese por vía de urgencia los trabajos necesarios para asegurar el muro. Finalmente, como el dueño no podía hacer frente a esa obra tan costosa, ha sido la propia Diputación quien la está ejecutando de manera subsidiaria.

Desde el departamento de Mobilidade, que dirige el diputado Uxío Benítez, explican que existe un "risco claro" para la seguridad vial por la posibilidad de nuevos desprendimientos. El martes por la mañana una brigada de conservación de la Diputación ya estuvo en la zona inspeccionando el terreno y realizó un primer corte de tráfico. Los trabajos propiamente dichos arrancaron ayer con la retirada de piedras, raíces y tierra, que amenazaban desprenderse. "El agua y el viento empujaban constantemente las piedras y la tierra, provocando desprendimientos. Ahora con esta obra esperamos resolver el problema", explicaban ayer desde la brigada, que contaba con la colaboración del propio dueño de los terrenos. Los trabajos de consolidación deberían finalizar a lo largo de la mañana de hoy, con la consolidación definitiva del talud, que alcanza una altura aproximada de diez metros. "Tal como estaba había riesgo de desprendimiento porque estaban los tocones de los árboles y las raíces en el aire y había grietas", explican.

El corte de tráfico fue comunicado a la Guardia Civil, Policía Local y al propio Concello de Bueu, al que también se le explicaron en qué consistirán los trabajos. Ayer a mediodía acudió hasta el lugar el concejal de Servizos, Fidel Castro, para interesarse por la actuación y comprobar como se desarrollaba. El diputado Uxío Benítez insistía ayer en que "queremos evitar calquera situación de perigo, tanto para as persoas como para os vehículos que transitan pola estrada" para justificar que fuese la propia Diputación quien asumiese la obra.

Lugar estrecho

La zona en la que se concentran los trabajos se halla un poco más arriba de la panadería O Romano y es uno de los puntos más estrechos de la carretera. En el lugar están trabajando una máquina retroexcavadora y un camión del parque de maquinaria, que es una de las razones por las que ha sido necesario restringir la circulación.

El anterior desprendimiento ocurrió en la madrugada del 26 al 27 de septiembre y al lugar tuvieron que acudir la Policía Local, Bombeiros do Morrazo y la brigada de obras de la Diputación, que se encargaron de limpiar la calzada y dejarla de nuevo transitable.