La tensión política en la corporación de Bueu sube de intensidad cuando quedan cinco días para las elecciones autonómicas del 25-S. Los grupos políticos de la oposición volvieron a aliarse para presentar al pleno, por vía de urgencia, una moción en la que reclamaban más facilidades para acceder a la documentación municipal y solicitar informes de la Secretaría Muncipal. La maniobra fue tumbada por el BNG, que cuenta con mayoría absoluta y acusa a PP, PSOE y ACB SON de formar una "pinza".
El voto contrario de los nacionalistas se interpreta desde la oposición como un intento de poner "barreras" a su labor de fiscalización y control. "Con ese voto Félix Juncal deja en entredicho la transparencia de la que tanto presume y deja al descubierto el miedo a enseñar sus quehaceres diarios", argumenta la portavoz del PP, Berta Pérez. La del lunes era la segunda vez que se debatía esta moción conjunta de la oposición. La primera fue en febrero, que en aquella ocasión se retiró del orden del día ante la promesa de reunir a los grupos para alcanzar un texto de consenso. "Nos tomó el pelo, nunca tuvo intención de hacer nada sobre este tema, en el que lo único que pedimos es poder contar con asesoramiento jurídico y optar a una mayor transparencia", añade Pérez. La concejala del PP pide que las "actuaciones totalitarias" de las que acusa al regidor sean "castigadas" en las próximas elecciones municipales. "Juncal acaba de hacerles el mayor de los desplantes a los vecinos, que es no contra con ellos para nada, ni siquiera para informarles de lo que hace", concluye.
