El fuego se declaró en una zona en la cima del Montecarrasco de Domaio, entre pistas forestales, lo que ayudó a que las llamas no se propagaran más. Precisamente hacía una semana, la nueva Asociación de Cazadores de Moaña, resultante de la segregación del Tecor de Marín, había colocado unos carteles de vedado de caza para ir marcando su territorio mientras no llega la resolución de la Xunta a la segregación y para que los cazadores, que ya pueden ir con sus perros al monte desde agosto, no cacen en esta zona.

La alcaldesa de Moaña,Leticia Santos, acudió a las dos de la madrugada hasta la zona del incendio con la patrulla de la Polcía Local y estuvo en el lugar hasta las seis de la mañana, pendiente por si había peligro para las casas, aunque nunca lo hubo pero los vecinos de San Lorenzo mostraban preocupación. Analizando el fuego no tiene dudas de que fue intencionado, primero por los tres focos y proque no era una noche de altas temperaturas como tampoco se daba ninguna cuestión para ser accidental: "A esas horas no hay posibilidad de que se hubiera tratado de un escape de quema". Reconoce que quien o quienes plantaron conocen bien el terreno porque es de difícil acceso y destaca que gracias al trabajo de los comuneros con las pistas limpias de maleza y los cortafuegos despejados, se pudo controlar mejor el fuego, que encontró también una barrera en los árboles de especies más resistentes al fuego que los comuneros han ido plantando.