Afectados por la regularización catastral realizada en Cangas desmienten a Hacienda y aseguran que los nuevos valores se incorporaron todos al nuevo padrón del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Los contribuyentes cangueses se mostraron su sorpresa ante las palabras de Hacienda, que mantiene que solo enviaron los nuevos valores catastrales a vecinos sin alegaciones pendientes, es decir que fueron contestadas o a aquellos que no las presentaron. Aparecen rechazadas alegaciones tales como que se considera inmueble a cotizar una piscina de plástico. También se detectó la contestación a un propietario que había muerto, en la que se indicaba que debía pagar por algo que sus herederos sostienen que nunca fue de su padre. La respuesta a esta alegación llegó a nombre del fallecido, pese a que la familia notificó su muerte.

Otro contribuyente señalaba ayer que Catastro había negado hasta en dos ocasiones que hubiese presentado alegaciones, respondiéndole a la tercera que, a lo mejor, la suya se encontraba dentro de un montón que estaban en Catastro sin responder. En este sentido, varios expertos señalan que las cartas que recibieron los vecinos de Cangas era una propuesta de resolución de regularización catastral, un proceso extraordinario, que no se convierte en firme hasta que las alegaciones sean resueltas, para lo que se establece un plazo de seis meses. Solo cuando es firme se puede incluir la nueva valoración en el padrón de 2016, sin embargo en Cangas las incluyeron ya, pese a faltar alegaciones por responder. Según fuentes municipales se presentaron alrededor de 2.000, es decir la mitad de las 4.000 cartas que Catastro remitió en este proceso de regularización catastral. En estos momentos lo que se está haciendo a mucha gente en el Organismo de Recaudación de la Administración Local (ORAL) es la suspensión del recibo emitido.

Pero lo que desconocen la mayoría de los contribuyentes de Cangas es que dentro de unos meses Catastro tratará de liquidar los atrasos de cuatro años. Esto supone que los afectados por la regularización catastral deberán hacer frente no solo al recibo del padrón de 2016 con los nuevos valores, sino a unos atrasos que multiplican por cuatro el recibo que les está llegando en la actualidad.

A los vecinos afectados lo que más le sorprende es que errores tan evidentes como que propiedades apuntadas a su nombre no fuera contestadas de una manera positiva. Por su parte, el regidor local espera que todas las quejas y dudas de los vecinos se aclaren en la reunión que tendrá el próximo martes con el gerente provincial del Catastro.

Según establece el procedimiento de regularización catastral 2013-2016, el plazo de resolución es de seis meses desde que se notifica a los interesados el acuerdo y la falta de resolución en plazo provoca la caducidad de los expedientes y el archivo de las respectivas actuaciones.

En el plazo de un mes desde la notificación de la resolución se puede interponer una reclamación económico administrativo ante el Tribunal de Económico Administrativo.