Horas de angustia las que se vivieron ayer por la tarde en la isla de Ons, aunque afortunadamente con un final feliz. La familia de Manuel Reiriz, un marinero de Bueu y natural de la isla de Ons, denunció su desaparición puesto que no sabían nada de él desde el domingo por la tarde. El hombre se encontraba pasando unos días en la isla, mientras su esposa e hijos estaban en Bueu, y ayer saltó la alarma porque no eran capaces de contactar con él y nadie lo había visto desde la tarde del domingo. Finalmente alrededor de las siete y media de la tarde fue localizado en el entorno de Canibeliñas, con un fuerte golpe en la cabeza, en una rodilla y con claros signos de encontrarse desorientado. El vecino fue evacuado por el helicóptero Pesca I y trasladado al hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo.

Las últimas noticias que se tenían de Reiriz eran del domingo por la noche. Su planeadora permanecía fondeada en la playa de As Dornas, al lado del muelle y con las llaves puestas. Como ayer nadie tenía noticias de él empezó a cundir la preocupación y por la tarde se activó un dispositivo de búsqueda, con la presencia de personal del Parque Nacional Illas Atlánticas, una lancha de la Guardia Civil, familiares y vecinos de la isla. Incluso hubo buzos que se sumergieron en el entorno del muelle porque el lunes por la mañana apareció una gran mancha de sangre en esa zona. No obstante, esa búsqueda no dio resultados.

Poco tiempo después de correrse la noticia de su desaparición algunas fuentes aseguraron que el lunes, alrededor de las seis de la madrugada, vieron a Manuel Reiriz vestido con una ropa de aguas en la zona de Canibeliñas, que se encuentra en la cara exterior de la isla. La familia también tenía constancia que su Whatsapp estuvo operativo precisamente hasta esa hora.

De inmediato la búsqueda se centró en la zona de Canibeliñas y poco después de las siete y media de la tarde de ayer se confirmó que Manuel Reiriz había sido localizado. Al escuchar la presencia del Pesca I el hombre salió a un camino y fue localizado, con heridas y evidentes signos de desorientación. Hasta el lugar se acercaron alguno de sus familiares, que lo convencieron para subirse al coche de los guardas de Medio Ambiente y regresar al centro de la isla. A continuación fue evacuado en helicóptero y trasladado al hospital Álvaro Cunqueiro, donde a última hora de ayer permanecía ingresado y en observación.