Alrededor de un millar de multas han puesto los agentes de la Policía Local de Cangas en el mes de julio que está a punto de acabar, y las previsiones apuntan a que en agosto no serán menos. Ese incremento del número de denuncias coincidiendo con el inicio de la temporada estival, la afluencia masiva a las playas y la proliferación de coches mal aparcados hace inviable su tramitación desde las dependencias municipales, lo que ha llevado al Concello a solicitar al ORAL una veintena de dispositivos electrónicos PDA que le permitan agilizar los trabajos y cumplir los plazos que figuran en el convenio suscrito entre ambas administraciones. La solicitud se formalizó ayer a través de un escrito del alcalde en el que advierte que son necesarias al menos seis computadoras de bolsillo (una por cada grupo de trabajo de la Policía Local), aunque lo ideal sería disponer de 20 PDA, una por cada agente.
Los responsables policiales calculan que cada multa requiere de entre diez y 15 minutos para recabar datos e introducirlos en el programa informático del ORAL, organismo de recaudación de la Diputación con el que Cangas tiene firmado desde 2011 el convenio para la tramitación y cobro en período voluntario de los expedientes sancionadores en materia de tráfico, seguridad vial y ordenanzas municipales de circulación. Con semejante aumento de volumen de trabajo y sin personal administrativo suficiente en la Policía Local, los dispositivos electrónicos de asistencia (PDA) se presentan como la herramienta imprescindible para que poder tramitar los expedientes en tiempo y forma, argumenta Xosé Manuel Pazos en su escrito. El sistema permitiría agilizar los trámites necesarios para que una multa sea efectiva en el menor tiempo posible, desde que un agente policial inicia el expediente sancionador.
El uso de PDA ya está extendido en casi todos los sectores, privados y públicos. Guardia Civil de Tráfico y Policía Local de muchas localidades han ido sustituyendo gradualmente el lápiz y la libreta por dispositivos electrónicos, pequeños ordenadores que van ganando terreno a los tradicionales boletines de denuncia. Los artilugios actuales cuentan con cámara fotográfica para captar las infracciones, listado con los tipos de infracciones, callejero e incluso las matrículas de los vehículos censados en la localidad. Una vez que el agente cumplimenta todos los campos y confirma la denuncia, el aparato expide un ticket que se entrega en mano al infractor o se colocará sobre el parabrisas de su vehículo si en ese momento no está presente. A través del código de barras del ticket, el ciudadano puede abonar la multa.
La Policía de Cangas pretende agilizar ese trámite con menor margen de error y un servicio más eficiente, pero sobre todo abreviar su comunicación al ORAL, que se encarga de la gestión y cobro de las multas de tráfico. La información que recogen las PDA en la vía pública -cada una puede archivar decenas de denuncias-- se vuelca posteriormente en el ordenador habilitados en la Jefatura, desde donde se transmiten los datos al Organismo Autónomo de Recaudación, dependiente de la Diputación Provincial.
Mientras la dotación de esos dispositivos electrónicos no se concreta, los mandatarios de Cangas también solicitan al ORAL revisar el convenio ante la "imposibilidade actual do departamento de Policía de cumprir os requisitos de prazos mínimos e outros".
