En la reunión de ayer se plantearon casi tantas dudas como vecinos asistieron a la cita, la mayoría relacionadas con las limitaciones de acceso a la calle peatonal y los requisitos para usar los aparcamientos exclusivos. Los representantes políticos y policiales respondieron a la gran mayoría en un "bombardeo" que se prolongó dos horas y se pusieron a disposición de los ciudadanos para ir limando otras a medida que se vayan planteando situaciones.

Por ejemplo, quedó claro que las tarjetas para acceder a Ozámiz son gratuitas y exclusivas para esa zona y no otorgan derechos en otros espacios peatonales del municipio, así como la obligatoriedad de llevarlas tanto coches como motos. Para el ruido que hacen algunas, cuyos pilotos pisan gas a fondo y que genera molestias, no hay solución adicional. Sí lo habrá, "a moi curto prazo", con las autocaravanas estacionadas en Rodeira, que se van a prohibir con señalización específica.

La Policía será "flexible" con vecinos que deban acceder temporalmente en coche por problemas de movilidad, traslado de enfermos o para tareas de carga y descarga puntuales, aunque se pide la colaboración de todos para que la ordenanza peatonal cumpla su cometido y no se desvirtúe en favor de un excesivo protagonismo de los coches. "Este é un proxecto compartido, e se non funciona prexudicámonos todos", advierten desde el Concello y comparte la mayoría de vecinos.