El informe del gerente del Consorcio de Bomberos de Pontevedra sobre el incendio que destruyó la mitad de la empresa frigorífica Fandicosta, en Domaio, el pasado 9 de mayo, concluye que es necesario que el Centro de Atención de Emerxencias CAE 112 tenga siempre en sala una dirección operativa y de mando, no sólo informativa, técnica y cualificada las 24 horas del día, los 365 días del año. El informe, que será remitido al Parlamento de Galicia, se presentó ayer en el pleno del Consorcio, presidido por la titular de la Diputación, Carmela Silva, dos meses después de la polémica que desató la extinción de este incendio que puso en evidencia la falta de coordinación a la hora de movilizar a los bomberos, sean de parques de gestión privada como los del Consorcio, o pública, como los de Vigo, para atender un incendio de estas dimensiones.

En el informe se especifica que tendría que ser una dirección para los diferentes servicios de emergencias gallelgos, desde el nivel 0de emergencias, sin tener que esperar al nivel 1 como en la actualidad. Sería un mando único para toda emergencia en Galicia. En este punto y por parte de la representación de la Xunta presente en el pleno como el director xeral de Emerxwencias, Luis Menor y los jefes territoriales de Pontevedra y Vigo. Cores Tourís y López Chaves, respectivamente, se informó que el nuevo CIAE 112 de A Estrada está concebido con esta filosofía, tanto en su construcción como equipamiento.

Además, el informe también concluye que es necesario establecer un protocolo autonómico para incendios en instalaciones con almacenamiento de amoníaco, como fue el caso de Fandicosta y de otras empresas que usan refrigeración industrial, y que provoca un excesivo tiempo de respuesta para incidencias.

Destaca la complejidad del incendio, ya que a los efectos de un típico incendio industrial, hubo que sumar además la peligrosidad de una nube tóxica en una zona densamente poblada. El documento alude a que las características constructivas de la nave dificultaron también la extinción, "algo que fixo imposible parar o avance do lume na nave A, pero que si se puido facer nas naves B e C". Destaca, por otro lado, la acertada decisión de los bomberos de guardia del Consorcio de no salir sólo con un vehículo de primera intervención, sino con todos los medios humanos y materiales posibles, lo que facilitó atacar en una primera fase el foco del incendio y después realizar una maniobra defensiva para cortar el avance y defender los tanques de amoníaco de la nave A.