Vigo se incorporó ayer de forma oficial al transporte metropolitano. Sin embargo, en la práctica habrá que esperar un poco más. La concesionaria del transporte público urbano debe adaptar sus autobuses para permitir el pago con la tarjeta metropolitana. Vitrasa calcula que estarán listos para el mes de septiembre.

No será necesaria nueva infraestructura en los vehículos de la compañía, sólo precisan el software para la tarjeta metropolitana La incorporación de los "vitrasas" al transporte metropolitano supone que estos transbordos urbanos serán gratuitos para los usuarios, siempre que estén vinculados a un desplazamiento entre varios municipios de los 13 que forman parte -todos los del área, menos Gondomar-. Estas son las claves:

| ¿Cómo funciona? El territorio adherido al plan de transporte está dividido en 11 zonas. El usuario paga por cada "salto" de una zona a otra y no por los transbordos, que pueda hacer en ellas, que le salen gratuitos.

| ¿Cuánto cuesta? Los descuentos son mayores cuanto mayor sea el número de saltos. Uno supone 0,85 euros; dos, 1,30 euros; tres, 1,84 euros -lo máximo para conectar Vigo con cualquiera de los otros 12 municipios-; cuatro, 2,24 euros: cinco, 3,13 euros; y seis, 3,68 euros. Los pasajeros frecuentes -más de 40 viajes/mes- tienen una reducción del 15% y las familias numerosas, del 50%.

| ¿Qué supone la entrada de Vigo? El ahorro del transbordo urbano. Hasta ahora, un estudiante de Cangas que se desplazaba en transporte público a Vigo para ir a la Universidad, además de los 0,85 euros del billete bonificado del barco -con la TMG-, tenía que abonar el precio del Vitrasa al campus -ya sea 1,32 en efectivo o 86 céntimos con tarjeta verde-. A partir de septiembre, se ahorrará íntegramente el billete del bus, que pagarán entre la Xunta (80%) y el Concello (20%).