El Cuello de la Jirafa es una de las constelaciones más olvidadas. Pocos son los que saben que desde el hemisferio norte o boreal, este mamífero también nos acompaña en la bóveda celeste. Una visión que recuerda al ser humano la pequeñez de su existencia comparada con la inmensidad del universo.

La directora Ana Vallés usa esta metáfora y el nombre de esta alineación de estrellas para el título de la obra que la compañía Matareile representa esta noche (22.30 horas) en el Auditorio. "El Cuello de la Jirafa" es una apuesta por un viaje onírico donde los espectadores tendrán que averiguar qué es lo imaginado, qué es lo vivivo y qué es lo soñado.

La obra coincide en horario con el espectáculo de calle de hoy de La Mostra porque es para un público limitado, de 120 personas, que es la capacidad del escenario en donde permanecerá en forma de "u". Todo ello para buscar el contacto directo con los asistentes. Aunque, como declara Vallés, "tampoco queremos dirigir la mirada de los espectadores, solo que estén con nosotros. Son lo suficientemente inteligentes para sacar sus conclusiones".

La directora gallega apuesta por una forma diferente de hacer teatro: "No contamos historias ni podemos resumir nuestras obras en argumentos, nuestra manera de entender lo que hacemos es otra. Lo que queremos hacer en el teatro es comunicar". Precisamente, "El Cuello de la Jirafa" tiene por objetivo que los espectadores reflexionen sobre cómo reaccionan frente a las cosas que les suceden en su vida diaria. "Nuestra existencia es un suceder de constantes repeticiones, pero nada ocurre dos veces de la misma manera. Por eso queremos que los espectadores se libren de los prejuicios que tienen en su vida diaria", declara. Por ello, Vallés pretende que la mirada del espectador cambie sin dejar de pertenecerle.

Otro de los elementos centrales de "El Cuello de la Jirafa" es la locura. Los personajes de esta historia atravesarán diferentes situaciones de enajenación en las que intentarán sembrar una duda: ¿Cuál es la realidad verdadera de las cosas? ¿La del loco o la del cuerdo? Unas preguntas que harán dudar al público sobre lo que están viviendo en realidad en la representación. Vallés señala que su apuesta por tratar el tema de la locura se debe a que "es un tema que nos fascina, nos crea incomodidad y al mismo tiempo que no podemos obviar".

Tiempo y espacio se difuminarán en una representación donde lo que se busca es irrumpir en lo cotidiano. La rueda del tiempo se parará para mostrar a el arte como una de los pocas vías de salvación que tiene el ser humano.

Al final de la obra los espectadores, que casi podrán tocar con los dedos a los actores, serán los encargados de decidir si finalmente lo que han visto se sale de lo establecido, si han descubierto los secretos que se escondían bajo lo invisible y si el tiempo, junto al arte, ha detenido su rutina. Todo ello para terminar un viaje que arranca en la ignorancia de lo observado y termina en una tenue luz.

"El Cuello de la Jirafa" es una apuesta por el teatro experimental que llama la atención de los aficionados a esta disciplina de las artes escénicas. La XXXIII Mostra de Teatro de Cangas tiene en esta representación una de sus apuestas más arriesgadas. Riesgo que viene amparado por los buenos resultados de crítica y taquilla.

AnaVallés, desde su compañía Matarile Teatro, acumula más de 30 años de experiencia animando al mundo de la escena gallega con obras como "Staying Alive", "Hombres Visagra" o "Teatro Invisible". En esta ocación, para viajar por "El Cuello de la Jirafa", contará con la presencia de actores como Óscar Codesido, Mónica García, Baltasar Patiño y María Roja. Además, la propia directoria Ana Vallés también forma parte del elenco de actores que participarán en la representación.