Vecinos de Cangas se quejan por la presencia de perros en la playa de Rodeira, incluso hablan de varios ataques y de las amenazas de los dueños de que iban a amenazarlos por maltrato animal.

Comenta uno de ellos, Jesús Molanes, que en varia ocasiones los perros sueltos que andan por el arenal de Rodeira lo trastabillaron y en otras los perros se echaron encima y le mordieron el chandal y el calzado. Jesús Molanes es diabético y se vio obligado a cambiar su ruta habitual de paseo con el fin de evitar a los perros, que afirma que a partir de las 21.00 horas invaden el paseo de Rodeira. Molanes recordó a los propietarios de los perros que debían llevar bozal y correa y la respuesta de ellos fue que le podían denunciar por maltrato animal. Comenta que en tres ocasiones llamó a la Policía Local. Después presentó una reclamación ante la concejalía de Medio Ambiente que dirige Tania Castro, que trascurrieron 15 días y aún no obtuvo respuesta. Comenta que ayer pidió una cita con ella y le dieron un número de teléfono. Asegura que llamó tres veces a ese número y solo obtuvo una respuesta con voz metálica: "el número al que llama está apagado o fuera de cobertura".

Aunque el año pasado se anunciara y se señalizara a bombo y platillo que la playa de A Congorza sería para pasear los perros, la Cofradía de Pescadores advirtió de que es una zona de marisqueo, por lo que se dio marcha atrás. Ahora se barajan las playas de A Chimenea, e Massó, y Lajuelas, limitando con Bueu.