Cientos de personas acudieron ayer a la iglesia y cementerio parroquial de Beluso para dar su último adiós al José Piñeiro González "Fully", el joven que falleció en la noche del sábado tras un grave accidente de moto en la carretera entre Gondomar y Vincios. Entre los asistentes había numerosos moteros y amigos del fallecido, que a la salida del féretro alzaron sus cascos al cielo como señal de respeto y despedida a su compañero.

La ceremonia de despedida fue multitudinaria, con cientos de personas que quisieron acompañar a la familia de José Piñeiro González. El cortejo fúnebre salió a las seis de la tarde desde el tanatorio municipal y a su llegada a la iglesia de Beluso ya le estaba esperando una multitud. La Policía Local de Bueu tuvo que organizar un dispositivo especial de tráfico en la zona y algunos de los asistentes reconocían emocionados que no se recordaba entierro tan multitudinario en la parroquia.

Entre la multitud de vecinos que acuedieron a dar su último adiós al joven había también representantes de la corporación municipal de Bueu.