Vecinos de la zona de Catro Camiños en Vilela (Tirán) esperan desde 1998 a que el Concello retire unas piedras de gran tamaño desprendidas de la fachada de un inmueble abandonado. Solicitan también desde entonces que se tapien la puerta y las ventanas de esta casa que definen como "un foco de ratas".

Y es que estas piedras obstruyen el camino de acceso a la vivienda de varios vecinos, según denuncia el concejal de XM Javier Carro.

Este edil traza una cronología desde la primera denuncia formulada ante el Concello el 10 de agosto de 1998. Se repitieron en 2001 y en 2009. Hace más de una década que existe un requerimiento por parte del departamento de Urbanismo al responsable de este inmueble para que adoptase medidas para evitar nuevos desprendimientos. En marzo de 2016 el caso se trasladó al Valedor do Pobo. Carro lamenta que no se le enviase la documentación y pide medidas a la administración "porque os veciños non poden seguir desamparados ante semellante ilegalidade".