Pero el juicio no sirvió para desvelar quién estaba detrás de la denuncia, ni tan siquiera para conocer a la abogada que presentó la demanda Laura Río Toral. Persiste la incógnita y, mientras tanto, el concejal de Urbanismo, Mariano Abalo, mantiene su decisión de paralizar cualquier actividad urbanística en la parcela mientras no finalice el proceso judicial. Todo apunta a una guerra comercial, pero no apareció el nombre de ninguna otra marca por el medio y tampoco hubo en este caso rumores de posibles chantajes para retirar el contencioso, como tiene habido en otros casos.

Mercadona proyecta para Cangas varias edificaciones: planta sótano de 1.885 metros cuadrados destinados a garaje y 280,45 metros ce rampa. En la planta baja se prevé una superficie de 2.329,35 metros cuadrados, de los que destina 1.955,25 metros cuadrados a sala de venta. En la planta primera hay una superficie total de 384,15 metros cuadrados. La denunciante señala que el proyecto del centro comercial excede la categoría 2ª de uso comercial de las Normas Subsidiarias de Planeamiento de Cangas, al tratarse de una actuación que encaja en la categoría 5ª de uso comercial y dicho uso no está permitido. La categoría segunda de uso comercial permite establecimientos de venta y o exposición desarrolladas en planta baja y/o primer piso en edificaciones residencias o de otros usos compatibles.