No hay mal que por bien no venga, pensarán los beneficiarios de una donación de ropa a Cáritas por parte de concesionaria del servicio integral de aguas, la UTE Gestión Cangas, que la rescató de un siniestro al que su seguro tuvo que hacer frente. La mercancía fue entregada al colectivo de caridad en un acto simbólico al que asistieron varios miembros de colectivo de caridad, que preside Fina Rial, el cura párroco, Severo Lobato, y representantes de la mercantil. "Ayudará a paliar las múltiples necesidades que afrontamos día a día", manifestaron sus receptores.

Cáritas de Cangas atiende actualmente a cerca de medio centenar de familias del municipio con escasos recursos económicos o en riesgo de exclusión social, una cifra que representa una "leve mejoría" con respecto a meses precedentes, aunque desde la asociación piden no bajar la guardia porque las peticiones de ayuda oscilan en función de muchas variables, pero la realidad socioeconómica sigue siendo "difícil" para muchas familias y en algunos hogares no entra ingreso alguno.

Además de ropa para bebés, niños y adultos, en la sede de Cáritas disponen de juguetes, material escolar, alimentos frescos, como frutas o huevos, cereales y legumbres, galletas, pastas, aceite, azúcar o cacao. Productos de primera necesidad que están entre los más demandados, sobre todo por familias con hijos. También se prestan otros servicios, como clases de alfabetización y aprendizaje del idioma a las que acuden personas de otras nacionalidades, mayoritariamente mujeres marroquíes y rumanas que necesitan desenvolverse en las gestiones del día a día.