La escasez de abejas, la creciente demanda de miel en el mercado, la localización de las colmenas en lugares recónditos y la dificultad para encontrar un método barato y eficaz para su protección son algunos de los motivos que están detrás del robo de colmenares en montes de la comarca morracense, según apunta el colectivo de apicultores, que ha denunciado el hurto de panales en al menos dos explotaciones situadas en Moaña (en una parcela de monte comunal de Meira) y Cangas (en el Outeiro de Coiro). Ambos están siendo investigados por la benemérita, cuyo Grupo de Robos en el Campo (ROCA), que tiene abiertos decenas de casos similares en Galicia, sobre todo en lugares de Pontevedra y Ourense.

Los denunciantes tienen "sospechosos", aunque no disponen de pruebas. La dificultad para acceder a algunas de estas colmenas hace pensar al colectivo que los responsables son personas "del entorno y que conocen bien el monte". Además, si se tratara de una "banda organizada" o los ladrones fueran foráneos no se llevarían "solo tres o cuatro colmenas", como en estos casos, sino un número mayor.

Los afectados esperan que las denuncias "no caigan en saco roto" y se pueda identificar a los culpables, mientras estudian medidas para poner freno a esta práctica. Una de las opciones es instalar cámaras de seguridad que se accionan con el movimiento y envían las imágenes al teléfono móvil. Otra, la colocación de dispositivos de geolocalización (GPS) colocados en el interior de las colmenas, que permita hacerles seguimiento.