Las quejas de vecinos afectados por el proceso de regularización catastral se multiplican en Cangas, donde ayer fueron decenas de personas las que se acercaron a las dependencias municipales y a la oficina del ORAL a realizar consultas o entregar alegaciones sobre los errores o abusos de los que dicen ser objeto. Para buscarle solución, el alcalde convocó por la mañana a los portavoces de los tres grupos que conforman el gobierno, y ha citado para esta tarde a los representantes de la oposición en busca de un frente común en defensa de los intereses de los ciudadanos.
El asunto se llevará mañana al Pleno de la Corporación, y Xosé Manuel Pazos pretende consensuar alguna postura que podría pasar por la propuesta de paralizar el proceso hasta que todo se aclare o ampliar el plazo de alegaciones, una posibilidad que ha rechazado la Gerencia Territorial del Catastro, tras la petición del alcalde.