Aparte de las dos cuestiones fundamentales de la propuesta de la federación provincial pontevedresa, la asamblea de los cabildos sirvió también para incluir alguna iniciativa más, que afectan principalmente al régimen de calamento y al balizaje.

La idea que se planteó es la de ampliar hasta la Ría de Arousa la normativa de dejar caladas las nasas para el pulpo a una profundidad mínima a fin de que no interfieran con otros sectores, especialmente con la flota de la nécora. "Este sistema xa o temos practicamente en toda Pontevedra e agora podería unirse a Ría de Arousa, alomenos as cofradías de Pontevedra. Los aparejos quedarían fondeados entre los 20 y los 25 metros de profundidad.

Otro de los temas de debate fue el de la normativa actual de balizaje, un sistema que el sector considera que es susceptible de mejora. "Hai moitas queixas porque é moi difícil levalo adiante. Temos que buscar un entendemento entre todos", señala José Antonio Gómez. Los marineros quieren modificar un reglamento que consideran excesivamente estricto, que permite únicamente dos colores (amarillo y naranja) y es muy específico con todos los elementos. "A veces perdes unha banderiña e xa te estás expoñendo a unha multa", señala Gómez.