El Plan Hidrolóxico de Galicia-Costa, aprobado hace unos meses por la Xunta para el periodo 2016-2021 (plazo que casi coincide con el fijado para completar el saneamiento de la ría) cifra en algo más de 48,5 millones de euros, la inversión mínima que se precisaría para su recuperación ambiental. El programa base de toda la actuación prevista en la ría se denomina "mejora de saneamiento y depuración en el sistema de Pontevedra", un capítulo que aparece con 37,5 millones. Alrededor de esta actuación global se plantean otras complementarias que elevan la cifra hasta los 48,5 millones y que se desarrollarán en el municipio capitalino, más los de Marín, Poio y Sanxenxo. Estos dos últimos concellos recibirán la segunda inversión más elevada de la ría, de 5,7 millones para la "mejora de la depuración de Sanxenxo y el saneamiento de Raxó". Tras este apartado, el Plan Hidrolóxico cita algo menos de cuatro millones para actuaciones en Marín. A estas cifras se deben añadir 1,4 euros más para redactar la "hoja de ruta", a punta de ser adjudicada a Eptisa-Idom, si no hay cambios de última hora.

Junto a las inversiones directas en nuevas obras, las previsiones incluyen también partidas elevadas para la "explotación" de diversas depuradoras, es decir, los gastos de gestión en los próximos años. El capítulo más elevado se reserva para la de Placeres, cuya ampliación es una prioridad para la Xunta, que reserva para su explotación 18, millones de También aparecen 904.294 euros para la de Vilaboa, 1.050.103 para la de Ponte Caldelas y 1.557.257 para la mejora de la de Cuntis. Según los cálculos de Augas de Galicia, la población total de la cuenca del río Lérez asciende a unos 165.000 habitantes de los que un elevado porcentaje se concentra en la desembocadura y en ambos márgenes de la ría.