Casi como un coro griego, las mujeres gitanas, que se congregaron durante todo el día de ayer en las inmediaciones del edificio judicial, lloraron sin rubor el ingreso en prisión de Sinaí Gímenez. Fueron ellas las que más consignas de injusticia lanzaron durante el día y las que aseguraban que los morones eras las víctimas, no los agresores.